Índice
La Agencia de Seguridad Nacional de EEUU ha enviado a España una alerta de grave amenaza islamista: el final del conflicto en Afganistán traerá a Europa miles de muyahidin
La alerta es para toda Europa, pero en especial para España: hay que reforzar los equipos de inteligencia designados a la identificación de captadores yihadistas y de combatientes muyahidín que vuelven –y seguirán volviendo- a Europa desde el frente de Afganistán y Pakistán.
La alarma proviene de la NSA norteamericana y ha llegado directamente a los servicios de inteligencia españoles. En concreto, al Centro Nacional de Coordinación Antiterrorista. La comunicación es escueta pero concluyente: ante la paulatina reducción de las operaciones militares en Afganistán, muchos líderes muyahidines que se asentaron allí tras la invasión norteamericana están preparando su regreso a Europa.
La principal recomendación del aviso es que se refuercen los equipos designados para identificar a elementos radicales que venga a Europa camuflados como simples inmigrantes entre la población musulmana común.
Se hace hincapié, sobre todo, aquellos individuos dedicados a las labores de captación y financiación, para evitar que se formen nuevas células yihadistas en España. El aviso no sólo incluye Afganistán como origen de las amenazas, sino también los países del Magreb, Yemen, Oriente Medio en general e incluso Chechenia.
Algo similar sucedió en los años noventa cuando los conflictos armados en los Balcanes llegaron a su fin. Miles de muyahidin que habían combatido en Bosnia, Kosovo y Albania se trasladaron a Europa Occidental, donde comenzaron a formar redes y a participar en actividades terroristas.
El problema, asegura un experto en terrorismo islámico en España, es que los recién llegados “parten de cero, no establecen ningún contacto con las actuales redes existentes, por lo que su identificación es mucho más complicada”.
Fuentes consultadas por El Confidencial Digital dan por cierta la alarma estadounidense y la relacionan con el aviso que los servicios de información e Inteligencia españoles han trasladado al Gobierno sobre el ‘riesgo probable’ de un atentado de origen yihadista.
Como ya informó ECD, los especialistas lo saben y han decidido reforzar el llamado ‘CNI antiterrorista’. Se trata del CNCA (Centro Nacional de Coordinación Antiterrorista), un organismo creado en mayo de 2004 por el Gobierno de Zapatero, que apenas es mencionado en los medios de comunicación pero cuyo su trabajo es de vital importancia en la lucha contra las organizaciones terroristas de todo tipo.
Según adelantaba El Confidencial Digital, en los últimos dos meses se han incorporado al CNCA hasta cuarenta nuevos expertos en terrorismo islamista con el objetivo de profundizar en el conocimiento de las redes que operan en España.
La alerta es para toda Europa, pero en especial para España: hay que reforzar los equipos de inteligencia designados a la identificación de captadores yihadistas y de combatientes muyahidín que vuelven –y seguirán volviendo- a Europa desde el frente de Afganistán y Pakistán.
La alarma proviene de la NSA norteamericana y ha llegado directamente a los servicios de inteligencia españoles. En concreto, al Centro Nacional de Coordinación Antiterrorista. La comunicación es escueta pero concluyente: ante la paulatina reducción de las operaciones militares en Afganistán, muchos líderes muyahidines que se asentaron allí tras la invasión norteamericana están preparando su regreso a Europa.
La principal recomendación del aviso es que se refuercen los equipos designados para identificar a elementos radicales que venga a Europa camuflados como simples inmigrantes entre la población musulmana común.
Se hace hincapié, sobre todo, aquellos individuos dedicados a las labores de captación y financiación, para evitar que se formen nuevas células yihadistas en España. El aviso no sólo incluye Afganistán como origen de las amenazas, sino también los países del Magreb, Yemen, Oriente Medio en general e incluso Chechenia.
Algo similar sucedió en los años noventa cuando los conflictos armados en los Balcanes llegaron a su fin. Miles de muyahidin que habían combatido en Bosnia, Kosovo y Albania se trasladaron a Europa Occidental, donde comenzaron a formar redes y a participar en actividades terroristas.
El problema, asegura un experto en terrorismo islámico en España, es que los recién llegados “parten de cero, no establecen ningún contacto con las actuales redes existentes, por lo que su identificación es mucho más complicada”.
Fuentes consultadas por El Confidencial Digital dan por cierta la alarma estadounidense y la relacionan con el aviso que los servicios de información e Inteligencia españoles han trasladado al Gobierno sobre el ‘riesgo probable’ de un atentado de origen yihadista.
Como ya informó ECD, los especialistas lo saben y han decidido reforzar el llamado ‘CNI antiterrorista’. Se trata del CNCA (Centro Nacional de Coordinación Antiterrorista), un organismo creado en mayo de 2004 por el Gobierno de Zapatero, que apenas es mencionado en los medios de comunicación pero cuyo su trabajo es de vital importancia en la lucha contra las organizaciones terroristas de todo tipo.
Según adelantaba El Confidencial Digital, en los últimos dos meses se han incorporado al CNCA hasta cuarenta nuevos expertos en terrorismo islamista con el objetivo de profundizar en el conocimiento de las redes que operan en España.
