La Policía detuvo el pasado jueves en el interior de un tren procedente de Milán y con destino París al presunto etarra Iñaki Domínguez Atxalandabaso. Dóminguez, huido en el 2002 y desde entonces uno de los miembros más buscados de la banda, llevaba una maleta con siete bolsas de plástico llenas de componentes electrónicos que se emplean en la fabricación y activación de artefactos explosivos. También le fueron incautados tres DNI españoles falsificados, más de 2.000 euros, un disco duro externo y una tarjeta de memoria. «Nada bueno hacía con el material que trasladaba. ETA sigue existiendo y el Gobierno sigue deteniendo», señaló ayer el vicepresidente primero y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba.
El terrorista fue procesado en marzo del 2010 por la Audiencia Nacional por colaborar con las FARC para atentar contra altos cargos colombianos en España, entre ellos los expresidentes Álvaro Uriba y Andrés Pastrana.




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