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Despiden al taquillero del Murcia Parque que denunció inseguridad
La empresa que explota la piscina municipal le notificó ayer que se iba a la calle: «Dicen que es por haber hablado con la prensa»
Si no es una represalia, se le parece bastante. Como una gota de agua a otra. Un empleado de la piscina Murcia Parque, Enrique Román, ha sido despedido después de haber aparecido, la pasada semana, en un reportaje de 'La Verdad' en el que se denunciaba la falta de seguridad existente en estas instalaciones municipales. El relato de las situaciones de riesgo que se estaban registrando en la piscina municipal era impactante: peleas multitudinarias, agresiones, robos, vejaciones a los empleados y hasta un intento de agresión sexual a una discapacitada en los aseos.
La denuncia periodística obligó a contratar a dos vigilantes de seguridad durante los viernes, sábados y domingos, que son los días en que se venían produciendo más incidentes, y además una patrulla de la Policía Local realiza una ronda por las instalaciones a cada hora.
Pero, además de haber obligado a tomar medidas para garantizar la seguridad de los bañistas, la información causó un profundo malestar entre los responsables de la empresa Elsamex S.L., que tiene una contrata de la Concejalía de Deportes para el mantenimiento y la explotación de esas instalaciones, así como de la firma Ebone, que es la responsable de los socorristas. El martes 20, al día siguiente de la publicación de la citada noticia, ninguno de los empleados de la piscina municipal quiso atender a los medios de comunicación: aseguraban que sus jefes les habían prohibido realizar declaraciones y apuntaban a que Enrique Román, quien hasta el día antes había estado atendiendo la taquilla, había sido despedido por haber aparecido en el reportaje, con su nombre y apellidos, hablando de la inseguridad existente.
En realidad, según explicó ayer este joven, aquel martes no había sido despedido. Todavía no. «La empresa me trasladó a la piscina de Monterromero, en la Universidad, pues también tiene adjudicada su explotación. Pero como la prensa se estuvo interesando por mí y preguntando si me habían despedido, pues al día siguiente, el miércoles, me volvieron a mandar al Murcia Parque para que pareciera que no iba a tomar represalias por lo que había dicho», explica.
Estaba anunciado
El despido, el anunciado despido, habría que decir, se produjo ayer, cuando ya había pasado una semana y las aguas parecían haber vuelto a su cauce. «Me llamaron el lunes y me dijeron que este martes estuviera a las once en las oficinas. Cuando he llegado, el encargado de la empresa, Gustavo, me ha dicho que me iban a despedir por haber hablado con la prensa. Me han dado el finiquito, aunque no he querido firmarlo, y me han dicho que depositarán el dinero en el juzgado, pero que estoy despedido», se lamentaba poco después.
Curiosamente, su novia, Rosario Costa, siguió el mismo camino. Y ello pese a que la chica, que estaba trabajando para Elsamex S.L. como administrativa, ni aparecía citada en el reportaje ni estaba trabajando el día en que se elaboró la información, el domingo 19. «A mí se me han llevado por delante sin tener nada que ver en este asunto, por las buenas. Me han dicho que me despiden por bajo rendimiento, pero está claro que lo han hecho por ser la novia de Enrique, porque nunca habían tenido la menor queja sobre mí, ni me habían hecho el menor reproche», sostiene.
Rosario Costa comenzó a trabajar en las oficinas del Murcia Parque el día 31 de mayo y su novio, Enrique, se incorporó como taquillero el 3 de junio. Tenían contrato hasta el 12 de septiembre, fecha prevista para el cierre de la piscina, y en los casi dos meses que llevaban trabajando sostienen que nunca recibieron queja alguna de los responsables de la firma. Hasta el pasado día 19, en que un periodista de 'La Verdad', alertado de la aparente inseguridad existente en las instalaciones, acudió a la piscina y comenzó a hablar con los bañistas y los empleados.
Todos los consultados relataron los incidentes que se sucedían en el recinto municipal, pero pidieron encarecidamente que no se les citara, por temor a sufrir represalias. Todos ellos, salvo Enrique Román, quien no tuvo problema a la hora de dar su identidad y de relatar el intento de agresión sexual a una joven discapacitada en los vestuarios, o una pelea entre unos 40 bañistas de origen magrebí y subsahariano.
También manifestó que el verano anterior, en que se produjo un acuchillamiento, pusieron vigilantes de seguridad, pero que este año no habían renovado el servicio. Un hecho que se demostró cierto: el pasado fin de semana, la empresa responsable de la seguridad volvió a poner dos vigilantes en la piscina.
«Duele porque es verdad»
«A la empresa le dolió mucho el contenido del reportaje porque todo lo que se denunciaba ahí era verdad y no podían oponer argumentos contra lo que estaba pasando», asegura Enrique, quien no parece arrepentirse de lo que dijo, pero que se muestra dolido y preocupado por el despido que ha seguido a sus palabras. «Me gustaría que la empresa reflexionara y me volviera a contratar, y también a mi novia, porque necesitamos el dinero. Nos hemos comprado una casa prefabricada y tenemos que pagarla», explica.
La empresa no se explica
Este periódico se puso ayer en contacto con uno de los encargados de la empresa Elsamex S.L., de nombre Gustavo, y que, según indican Enrique y Rosario, fue la persona que ayer les informó de que iban a ser despedidos. «Han sido despedidos porque no hacían bien su trabajo», se limitó a confirmar esta persona, quien sin embargo eludió ofrecer explicaciones sobre el tipo de faltas laborales en las que podían haber incurrido los dos empleados. Tampoco quiso pronunciarse cuando el periodista le insistió sobre la posibilidad de que Enrique, y 'de rebote' su novia, hubieran sido despedidos por las manifestaciones que el primero realizó a 'La Verdad'. «No tengo nada que decir», insistió.
Enrique y Rosario, a la derecha, ayer, frenta al Murcia Parque. A su lado, dos policías locales abandonan las instalaciones tras hacer la ronda de seguridad. :: VICENTE VICENS/AGM
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