El centro de protección de los túneles del Ave se queda sin vigilancia privada
UGT denuncia el progresivo desmantelamiento del puesto de control de la estación
El responsable de la Sectorial de Unión General de Trabajadores (UGT), José Centeno, lanzó ayer un mensaje de aviso sobre el cierre del centro de protección y seguridad de los túneles de la línea de Alta Velocidad ferroviaria que atraviesan la sierra de Guadarrama. Esa clausura se hará efectiva mañana. Este puesto, instalado en un principio en la estación del Ave de Segovia, fue un compromiso que adquirieron con la provincia el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) y el propio Ministerio de Fomento antes incluso de que los servicios de Alta Velocidad fueran una realidad en el apeadero del entorno de Juarrillos, explica Centeno.
El representante sindical considera que el organismo público y la Administración central «incumplen su promesa» con Segovia ante las sucesivas decisiones que han llevado a reducir el personal disponible en ese centro de vigilancia.
«Es un problema que afecta a Segovia y al resto de Castilla y León», subrayó el secretario estatal de la Federación de Seguridad de UGT. El Adif, por su parte, ha justificado el recorte de efectivos en cuestiones presupuestarias. El Administrador «ha reubicado y ha eliminado el servicio de seguridad privada del centro de protección y seguridad» de la estación segoviana, declaró Centeno.
El delegado sindical de UGT apostilló que esta reestructuración acometida por la entidad pública lleva aparejada la pérdida de cinco empleos, los cinco trabajadores que desempeñaban las tareas de vigilancia privada. La mala noticia es que la destrucción de contratos no es nueva, ya que el año pasado el recorte acometido por el Adif en este centro de control afectó a otros cuatro trabajadores. «Se va desmantelando poco a poco», sospecha José Centeno, que cuenta con la resolución de apoyo a su denuncia redactada por UGT Segovia, que ayer mismo fue presentada en la Subdelegación del Gobierno.
Además de la repercusión laboral, las consecuencias más inmediatas que observa el secretario de la Sectorial de Seguridad de la central sindical demandante es la disminución de las garantías de seguridad que puede conllevar la pérdida del personal de vigilancia privada. Para José Centeno, en esta materia de protección y prevención «no se puede recortar ni un euro».
El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias ha reubicado el servicio que hasta ahora se prestaba en la estación del Ave de Segovia y lo ha trasladado a Atocha, en Madrid, lo que supone «una chapuza», según lo tildó Centeno, ya que ha de primar el criterio lógico de la proximidad espacial.
UGT denuncia el progresivo desmantelamiento del puesto de control de la estación
El responsable de la Sectorial de Unión General de Trabajadores (UGT), José Centeno, lanzó ayer un mensaje de aviso sobre el cierre del centro de protección y seguridad de los túneles de la línea de Alta Velocidad ferroviaria que atraviesan la sierra de Guadarrama. Esa clausura se hará efectiva mañana. Este puesto, instalado en un principio en la estación del Ave de Segovia, fue un compromiso que adquirieron con la provincia el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) y el propio Ministerio de Fomento antes incluso de que los servicios de Alta Velocidad fueran una realidad en el apeadero del entorno de Juarrillos, explica Centeno.
El representante sindical considera que el organismo público y la Administración central «incumplen su promesa» con Segovia ante las sucesivas decisiones que han llevado a reducir el personal disponible en ese centro de vigilancia.
«Es un problema que afecta a Segovia y al resto de Castilla y León», subrayó el secretario estatal de la Federación de Seguridad de UGT. El Adif, por su parte, ha justificado el recorte de efectivos en cuestiones presupuestarias. El Administrador «ha reubicado y ha eliminado el servicio de seguridad privada del centro de protección y seguridad» de la estación segoviana, declaró Centeno.
El delegado sindical de UGT apostilló que esta reestructuración acometida por la entidad pública lleva aparejada la pérdida de cinco empleos, los cinco trabajadores que desempeñaban las tareas de vigilancia privada. La mala noticia es que la destrucción de contratos no es nueva, ya que el año pasado el recorte acometido por el Adif en este centro de control afectó a otros cuatro trabajadores. «Se va desmantelando poco a poco», sospecha José Centeno, que cuenta con la resolución de apoyo a su denuncia redactada por UGT Segovia, que ayer mismo fue presentada en la Subdelegación del Gobierno.
Además de la repercusión laboral, las consecuencias más inmediatas que observa el secretario de la Sectorial de Seguridad de la central sindical demandante es la disminución de las garantías de seguridad que puede conllevar la pérdida del personal de vigilancia privada. Para José Centeno, en esta materia de protección y prevención «no se puede recortar ni un euro».
El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias ha reubicado el servicio que hasta ahora se prestaba en la estación del Ave de Segovia y lo ha trasladado a Atocha, en Madrid, lo que supone «una chapuza», según lo tildó Centeno, ya que ha de primar el criterio lógico de la proximidad espacial.