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PSE y PP piden al Gobierno que mantenga los dos escoltas a sus principales dirigentes
EL CORREO 29/05/2013
· Los socialistas aseguran que el Ejecutivo vasco les ha garantizado la misma seguridad que hasta ahora, pero los populares lo ponen en duda.
A falta de apenas tres días para la fecha marcada por el Gobierno vasco para empezar a hacer efectivos los cambios, la reducción de escoltas a los altos cargos de los partidos y de la judicatura del País Vasco continuaba ayer inmersa en diversas interrogantes. Las dudas en torno a la reestructuración de la seguridad personal de los dirigentes políticos y judiciales llegaban ayer a tal punto que, mientras desde el PSE se aseguraba que el Ejecutivo había decidido rectificar y mantener la protección a algunos de sus dirigentes en los términos actuales, en el PP explicaban todo lo contrario: esto es, que no ha habido cambios a pesar de sus protestas y que la última notificación que han recibido del Departamento de Seguridad indica que sus cargos pasarán a estar protegidos a partir de ahora por un ‘berroci’, en lugar de los dos agentes actuales.
Altos cargos del PSE y PP protestaron ante la consejera de Seguridad, Estefanía Beltrán de Heredia, cuando hace un par de semanas tuvieron conocimiento de que se les iba a reducir a la mitad los servicios de escolta, además de la supresión de la protección a algunos cargos intermedios. En estos momentos, sólo algunos representantes institucionales, dirigentes de partidos y concejales de algunas localidades mantienen la protección. Desde el cese definitivo de ETA, las partidas que los gobiernos vasco y central destinan a estos gastos han sufrido drásticos recortes.
Desde el PP mostraron a la consejera su «absoluta disconformidad» con esta medida, que tildaron de «inaceptable» y que interpretaron como una forma de «desentenderse» de la seguridad. Según dijeron, «más allá de que ETA no ha desaparecido», a la hora de aplicar esta medida se debe tener en cuenta la «presión social» que «siguen sufriendo» los representantes populares en muchos municipios por parte del entorno de la izquierda abertzale. Además, insistieron en que el PP es ahora el objetivo en el que centran sus protestas otros movimientos, «como los antidesahucios o el 15-M».
A pesar de sus protestas, desde el PP aseguran que el Gobierno de Urkullu no les ha notificado su intención de reconsiderar la medida. Fuentes del PSE, en cambio, recalcan que el Departamento de Seguridad les ha anunciado que algunos dirigentes mantendrán la protección doble, tal y como estaba. Una versión corroborada por fuentes de la Ertzaintza, que aseguran que algunos mandos han comunicado a varios ‘berrocis’ encargados de la protección de estos cargos que seguirán en sus puestos.
Los medios consultados no descartan que, en este «ambiente de confusión», se produzcan cambios en las próximas horas. Los portavoces consultados en el Ejecutivo insistieron en que no comentan los temas referentes a la seguridad.
EL CORREO 29/05/2013
· Los socialistas aseguran que el Ejecutivo vasco les ha garantizado la misma seguridad que hasta ahora, pero los populares lo ponen en duda.
A falta de apenas tres días para la fecha marcada por el Gobierno vasco para empezar a hacer efectivos los cambios, la reducción de escoltas a los altos cargos de los partidos y de la judicatura del País Vasco continuaba ayer inmersa en diversas interrogantes. Las dudas en torno a la reestructuración de la seguridad personal de los dirigentes políticos y judiciales llegaban ayer a tal punto que, mientras desde el PSE se aseguraba que el Ejecutivo había decidido rectificar y mantener la protección a algunos de sus dirigentes en los términos actuales, en el PP explicaban todo lo contrario: esto es, que no ha habido cambios a pesar de sus protestas y que la última notificación que han recibido del Departamento de Seguridad indica que sus cargos pasarán a estar protegidos a partir de ahora por un ‘berroci’, en lugar de los dos agentes actuales.
Altos cargos del PSE y PP protestaron ante la consejera de Seguridad, Estefanía Beltrán de Heredia, cuando hace un par de semanas tuvieron conocimiento de que se les iba a reducir a la mitad los servicios de escolta, además de la supresión de la protección a algunos cargos intermedios. En estos momentos, sólo algunos representantes institucionales, dirigentes de partidos y concejales de algunas localidades mantienen la protección. Desde el cese definitivo de ETA, las partidas que los gobiernos vasco y central destinan a estos gastos han sufrido drásticos recortes.
Desde el PP mostraron a la consejera su «absoluta disconformidad» con esta medida, que tildaron de «inaceptable» y que interpretaron como una forma de «desentenderse» de la seguridad. Según dijeron, «más allá de que ETA no ha desaparecido», a la hora de aplicar esta medida se debe tener en cuenta la «presión social» que «siguen sufriendo» los representantes populares en muchos municipios por parte del entorno de la izquierda abertzale. Además, insistieron en que el PP es ahora el objetivo en el que centran sus protestas otros movimientos, «como los antidesahucios o el 15-M».
A pesar de sus protestas, desde el PP aseguran que el Gobierno de Urkullu no les ha notificado su intención de reconsiderar la medida. Fuentes del PSE, en cambio, recalcan que el Departamento de Seguridad les ha anunciado que algunos dirigentes mantendrán la protección doble, tal y como estaba. Una versión corroborada por fuentes de la Ertzaintza, que aseguran que algunos mandos han comunicado a varios ‘berrocis’ encargados de la protección de estos cargos que seguirán en sus puestos.
Los medios consultados no descartan que, en este «ambiente de confusión», se produzcan cambios en las próximas horas. Los portavoces consultados en el Ejecutivo insistieron en que no comentan los temas referentes a la seguridad.
