Madrid ArenaSeguriber redujo los vigilantes de 46 a 38 en el Arena para abaratar costes
EFEEl coordinador de Seguruiber ha reconocido que tanto su empresa como Madrid Espacios y Congresos ahorraron en el personal necesario.
El coordinador de Seguriber Juan José París Nalda ha reconocido hoy ante el juez que no había Policía Municipal ni personal de seguridad en los puntos habituales del Madrid Arena la noche de la tragedia y que su empresa redujo el número de vigilantes de 46 a 38 para abaratar costes.
París Nalda ha comparecido hoy como imputado durante más de cuatro horas ante el titular del Juzgado de Instrucción número 51 de Madrid, Eduardo López-Palop, que investiga la muerte de cinco jóvenes en una avalancha humana en el Madrid Arena el pasado 1 de noviembre.
El coordinador de Seguriber, que deberá comparecer dos veces al mes en el juzgado, ha acreditado su colaboración con el esclarecimiento de los hechos, así como "el cumplimiento de las obligaciones" de su empresa en la seguridad exterior del recinto, ha subrayado su abogado, Alfonso Coronel de Palma.
Sin embargo, los letrados de dos de las víctimas han señalado que Seguriber incumplió el plan de seguridad del recinto, que establecía que como mínimo hubiera dos vigilantes por puerta, pero solo hubo uno.
París Nalda ha explicado que la noche de los hechos cumplió órdenes del coordinador de Operaciones y Proyectos de Madrid Espacios y Congresos, Francisco del Amo, que ordenó la apertura de la puerta de emergencia por la que entraron entre 3.500 y 4.000 personas, de acuerdo con las acusaciones particulares.
Ha detallado que Seguriber redujo de 46 a 38 el número de vigilantes de seguridad en el Madrid Arena para "abaratar costes", al tiempo que ha apuntado que la dotación de efectivos era superior en otros eventos similares.
El coordinador de Seguriber ha reconocido que tanto su empresa como Madrid Espacios y Congresos ahorraron en el personal necesario para garantizar la seguridad en el Madrid Arena, según Felipe Moreno, el abogado de la familia de Rocío Oña, una de las víctimas de la tragedia.
París Nalda ha dicho que el día de los hechos "no hubo ninguna inspección" de la Delegación del Gobierno al recinto, sino que hubo una visita rápida en la que se entregó la documentación del evento.
Moreno ha estimado que la visita de la Delegación del Gobierno fue "un paripé para cubrir el expediente", lo que, en su opinión, supone "un incumplimiento del control de las medidas de seguridad para celebrar un evento de estas características".
Por su parte, Abdón Núñez, el abogado de la familia de Belén Langdon, una de las víctimas de la tragedia, ha indicado que el coordinador de seguridad desconocía los planes de seguridad y vigilancia del Madrid Arena.
Núñez ha calificado de "lamentable" la declaración de París Nalda, que ha incurrido en contradicciones entre sus declaraciones ante la Policía y un informe firmado por él mismo.
Antes de la comparecencia del coordinador de Seguriber, el juez del caso Madrid Arena ha citado a las partes para escuchar 21 llamadas al 112 hechas por asistentes a la fiesta de Halloween quejándose del sobreaforo, de las cuales ocho aseguraban que no podían salir del pabellón porque todas las puertas estaban cerradas.
Núñez ha calificado de "espeluznantes" estas llamadas, que comenzaron a las dos y media de la madrugada y que en ocho casos pidieron que por favor mandaran a alguien porque todas las puertas estaban cerradas y no podían salir.
En esas llamadas, afirmaban que en el Madrid Arena había muchísima gente, que había una persona muerta y que a una niña la estaban atendiendo en una barra. http://www.intereconomia.com/noticias-gaceta/sociedad/seguriber-redujo-los-vigilantes-46-38-arena-para-abaratar-costes-20130308
EFEEl coordinador de Seguruiber ha reconocido que tanto su empresa como Madrid Espacios y Congresos ahorraron en el personal necesario.
París Nalda ha comparecido hoy como imputado durante más de cuatro horas ante el titular del Juzgado de Instrucción número 51 de Madrid, Eduardo López-Palop, que investiga la muerte de cinco jóvenes en una avalancha humana en el Madrid Arena el pasado 1 de noviembre.
El coordinador de Seguriber, que deberá comparecer dos veces al mes en el juzgado, ha acreditado su colaboración con el esclarecimiento de los hechos, así como "el cumplimiento de las obligaciones" de su empresa en la seguridad exterior del recinto, ha subrayado su abogado, Alfonso Coronel de Palma.
Sin embargo, los letrados de dos de las víctimas han señalado que Seguriber incumplió el plan de seguridad del recinto, que establecía que como mínimo hubiera dos vigilantes por puerta, pero solo hubo uno.
París Nalda ha explicado que la noche de los hechos cumplió órdenes del coordinador de Operaciones y Proyectos de Madrid Espacios y Congresos, Francisco del Amo, que ordenó la apertura de la puerta de emergencia por la que entraron entre 3.500 y 4.000 personas, de acuerdo con las acusaciones particulares.
Ha detallado que Seguriber redujo de 46 a 38 el número de vigilantes de seguridad en el Madrid Arena para "abaratar costes", al tiempo que ha apuntado que la dotación de efectivos era superior en otros eventos similares.
El coordinador de Seguriber ha reconocido que tanto su empresa como Madrid Espacios y Congresos ahorraron en el personal necesario para garantizar la seguridad en el Madrid Arena, según Felipe Moreno, el abogado de la familia de Rocío Oña, una de las víctimas de la tragedia.
París Nalda ha dicho que el día de los hechos "no hubo ninguna inspección" de la Delegación del Gobierno al recinto, sino que hubo una visita rápida en la que se entregó la documentación del evento.
Moreno ha estimado que la visita de la Delegación del Gobierno fue "un paripé para cubrir el expediente", lo que, en su opinión, supone "un incumplimiento del control de las medidas de seguridad para celebrar un evento de estas características".
Por su parte, Abdón Núñez, el abogado de la familia de Belén Langdon, una de las víctimas de la tragedia, ha indicado que el coordinador de seguridad desconocía los planes de seguridad y vigilancia del Madrid Arena.
Núñez ha calificado de "lamentable" la declaración de París Nalda, que ha incurrido en contradicciones entre sus declaraciones ante la Policía y un informe firmado por él mismo.
Antes de la comparecencia del coordinador de Seguriber, el juez del caso Madrid Arena ha citado a las partes para escuchar 21 llamadas al 112 hechas por asistentes a la fiesta de Halloween quejándose del sobreaforo, de las cuales ocho aseguraban que no podían salir del pabellón porque todas las puertas estaban cerradas.
Núñez ha calificado de "espeluznantes" estas llamadas, que comenzaron a las dos y media de la madrugada y que en ocho casos pidieron que por favor mandaran a alguien porque todas las puertas estaban cerradas y no podían salir.
En esas llamadas, afirmaban que en el Madrid Arena había muchísima gente, que había una persona muerta y que a una niña la estaban atendiendo en una barra.