Fernández Díaz insiste en que la banda debe "disolverse"
La Policía cree que el jefe etarra detenido participó en los dos asesinatos de Calviá
31 MAY 2012 | ALBERTO LARDIÉS.
Oroitz Gurruchaga pasó a la lista de terroristas en julio de 2009, justo después de los atentados. Llevaba material para fabricar bombas como la que mató a los agentes.
Fuentes de la lucha antiterrorista aseguran a LA GACETA que la Policía sospecha que Oroitz Gurruchaga, el presunto jefe militar de ETA detenido el pasado domingo al Sur de Francia, pudo tomar parte en el atentado perpetrado el 30 de julio de 2009 contra la Guardia Civil en Calviá (Mallorca). Aquel cobarde ataque provocó la muerte de dos agentes de la Benemérita: Diego Salvá Lezaun y Carlos Saénz de Tejada.
Las fuentes consultadas apuntalan esta tesis con dos datos irrefutables. Para empezar, en ese momento Gurruchaga era un miembro activo de ETA, teniendo en cuenta que sólo unos meses antes, en diciembre de 2008, anunció en el diario Gara su incorporación a la organización criminal. En segundo lugar, el pasado domingo, cuando fue arrestado junto con el también etarra Javier Aramburu, Gurruchaga portaba en el vehículo ampollas de mercurio, que sirven para fabricar bombas como las que se utilizaron en aquel atentado.
Así, los agentes del orden tienen motivos para trabajar con esta hipótesis, teniendo en cuenta, además, que hoy día no existen datos fiables sobre aquel vil asesinato de los agentes Salvá y Sáenz de Tejada. Cuestión distinta es llegar a conocer cómo fue esa hipotética participación de Gurruchaga en el atentado. Según las citadas fuentes, este terrorista, cuyo hermano falleció en 2002 al manipular una bomba, pudo tomar parte siendo uno de los autores materiales o colaborando con los mismos. Así las cosas, ahora se antoja decisivo el resultado de los interrogatorios a los que se está sometiendo al terrorista.
Quizás no fue casualidad, por tanto, que Gurruchaga pasase a formar parte de la lista de etarras más buscados justo el 31 de julio de 2009, al día siguiente del atentado. El Ministerio del Interior, entonces comandado por el socialista Alfredo Pérez Rubalcaba, publicó las fotografías de Gurruchaga y otros etarras, y aseguró que se trataba de terroristas que podrían haber entrado en España para perpetrar atentados.
Este diario se puso ayer en contacto con Antonio Salvá, padre de Diego Salvá, uno de los dos asesinados en Calviá. Este confirmó que el mismo domingo recibió una llamada desde el Gobierno para informarle precisamente de la posibilidad de que Gurruchaga sea uno de los asesinos de su hijo. En todo caso, Antonio Salvá espera que el jefe etarra detenido al menos pueda aportar información determinante para averiguar, por fin, quién cometió el atentado.
Un día antes de asesinar a los dos guardias civiles en Mallorca, el 20 de julio de 2009, ETA también realizó un brutal atentado, que buscaba una matanza, contra la Casa Cuartel de la Benemérita en Burgos. Precisamente ayer, el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, inauguró el nuevo acuartelamiento de Burgos. Y allí dijo que a ETA no le queda otro futuro más que la “disolución” porque “está derrotada policialmente”. Además, expuso que la reconstrucción de la casa cuartel es el “máximo” exponente de la Democracia ante la “barbarie” de los terroristas.
Las obras de la nueva comandancia del Instituto Armado, que han consistido en la demolición parcial del inmueble, el reforzamiento de su estructura y la rehabilitación del mismo, costaron 14,8 millones de euros sufragados íntegramente por Interior.
Por otro lado, los arrestos de los etarras el fin de semana están sirviendo para que Batasuna, brazo político de la banda, siga retratándose. Así, ayer el batasuno Pernando Barrena restó “credibilidad” a las palabras del ministro del Interior, que consideró que los detenidos el domingo en Francia pretendían “captar personas” para ETA.
http://www.intereconomia.com/noticias-gaceta/politica/policia-cree-que-jefe-etarra-detenido-participo-los-asesinatos-calvia-20120
La Policía cree que el jefe etarra detenido participó en los dos asesinatos de Calviá
31 MAY 2012 | ALBERTO LARDIÉS.
Oroitz Gurruchaga pasó a la lista de terroristas en julio de 2009, justo después de los atentados. Llevaba material para fabricar bombas como la que mató a los agentes.
Fuentes de la lucha antiterrorista aseguran a LA GACETA que la Policía sospecha que Oroitz Gurruchaga, el presunto jefe militar de ETA detenido el pasado domingo al Sur de Francia, pudo tomar parte en el atentado perpetrado el 30 de julio de 2009 contra la Guardia Civil en Calviá (Mallorca). Aquel cobarde ataque provocó la muerte de dos agentes de la Benemérita: Diego Salvá Lezaun y Carlos Saénz de Tejada.
Las fuentes consultadas apuntalan esta tesis con dos datos irrefutables. Para empezar, en ese momento Gurruchaga era un miembro activo de ETA, teniendo en cuenta que sólo unos meses antes, en diciembre de 2008, anunció en el diario Gara su incorporación a la organización criminal. En segundo lugar, el pasado domingo, cuando fue arrestado junto con el también etarra Javier Aramburu, Gurruchaga portaba en el vehículo ampollas de mercurio, que sirven para fabricar bombas como las que se utilizaron en aquel atentado.
Así, los agentes del orden tienen motivos para trabajar con esta hipótesis, teniendo en cuenta, además, que hoy día no existen datos fiables sobre aquel vil asesinato de los agentes Salvá y Sáenz de Tejada. Cuestión distinta es llegar a conocer cómo fue esa hipotética participación de Gurruchaga en el atentado. Según las citadas fuentes, este terrorista, cuyo hermano falleció en 2002 al manipular una bomba, pudo tomar parte siendo uno de los autores materiales o colaborando con los mismos. Así las cosas, ahora se antoja decisivo el resultado de los interrogatorios a los que se está sometiendo al terrorista.
Quizás no fue casualidad, por tanto, que Gurruchaga pasase a formar parte de la lista de etarras más buscados justo el 31 de julio de 2009, al día siguiente del atentado. El Ministerio del Interior, entonces comandado por el socialista Alfredo Pérez Rubalcaba, publicó las fotografías de Gurruchaga y otros etarras, y aseguró que se trataba de terroristas que podrían haber entrado en España para perpetrar atentados.
Este diario se puso ayer en contacto con Antonio Salvá, padre de Diego Salvá, uno de los dos asesinados en Calviá. Este confirmó que el mismo domingo recibió una llamada desde el Gobierno para informarle precisamente de la posibilidad de que Gurruchaga sea uno de los asesinos de su hijo. En todo caso, Antonio Salvá espera que el jefe etarra detenido al menos pueda aportar información determinante para averiguar, por fin, quién cometió el atentado.
Un día antes de asesinar a los dos guardias civiles en Mallorca, el 20 de julio de 2009, ETA también realizó un brutal atentado, que buscaba una matanza, contra la Casa Cuartel de la Benemérita en Burgos. Precisamente ayer, el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, inauguró el nuevo acuartelamiento de Burgos. Y allí dijo que a ETA no le queda otro futuro más que la “disolución” porque “está derrotada policialmente”. Además, expuso que la reconstrucción de la casa cuartel es el “máximo” exponente de la Democracia ante la “barbarie” de los terroristas.
Las obras de la nueva comandancia del Instituto Armado, que han consistido en la demolición parcial del inmueble, el reforzamiento de su estructura y la rehabilitación del mismo, costaron 14,8 millones de euros sufragados íntegramente por Interior.
Por otro lado, los arrestos de los etarras el fin de semana están sirviendo para que Batasuna, brazo político de la banda, siga retratándose. Así, ayer el batasuno Pernando Barrena restó “credibilidad” a las palabras del ministro del Interior, que consideró que los detenidos el domingo en Francia pretendían “captar personas” para ETA.
http://www.intereconomia.com/noticias-gaceta/politica/policia-cree-que-jefe-etarra-detenido-participo-los-asesinatos-calvia-20120