‘Loco ministerio del Interior’:
Dos de los tres agentes antidisturbios a los que el ministerio del Interior ha abierto expediente por su actuación en los disturbios ocurridos durante la manifestación anti-JMJ en Madrid, no se encontraban en el lugar de los hechos: estaban en otro sitio. Y ha mezclado imágenes de varios vídeos
as prisas por dar una respuesta institucional a las denuncias ciudadanas, junto con la presión desde Internet, han sido claves para cometer una serie de errores, más propios de películas como ‘Loca Academia de Policía’.
El miércoles, el director general de la Policía y la Guardia Civil, Francisco Javier Velázquez, ordenó la apertura de expedientes disciplinarios por falta grave a tres agentes de la Unidad de Intervención Policial (UIP), al considerar que “se extralimitaron en sus funciones” durante la actuación policial posterior a la concentración laica celebrada el día 18 en Madrid.
La decisión se tomó después de analizar las imágenes de varios vídeos, difundidos a través de Internet, en las que aparece un grupo de agentes cargando contra una joven que les había increpado, y contra un fotógrafo que había captado dicha actuación.
La bofetada que uno de los policías propinó a la manifestante provocó una oleada de denuncias por parte de otros asistentes a la marcha anti-Papa, lo que llevó al ministerio del Interior a tratar de paliarlo mediante la apertura de una investigación.
Dos de los tres agentes que han sido expedientados no se encontraban en el lugar de los hechos que aparecen en los vídeos analizados desde el ministerio. Interior ha confundido las identidades de los antidisturbios.
Estaban en Sol
Miembros cualificados de la Policía Nacional explican a ECD que dos de los tres policías sancionados “estaban en Sol, junto a cientos de agentes más, pero ni se acercaron a la calle donde estaban la chica y el fotógrafo que aparecen en los vídeos”. Lo pueden demostrar.
Además, uno de los agentes expedientados es una mujer que forma parte de la Unidad de Intervención Policial, “cuando en las imágenes subidas a Internet no aparece ninguna compañera, y sólo puede verse hombres”.
Esas fuentes explican que en la investigación “se han mezclado imágenes de varios vídeos, sin tener algunos de ellos nada que ver con la acción contra la manifestante y el fotógrafo que ha provocado la apertura de expediente por parte del ministerio.
Los tres agentes están descansando
Las fuentes consultadas por ECD explican que los tres agentes expedientados “saben desde la semana pasada que tendrán que prestar declaración ante un instructor y un secretario de la Dirección de Policía en las próximas fechas, pero aún no conocen los motivos exactos por los que se les ha citado, ya que no se les ha notificado nada formalmente”.
No obstante, los policías antidisturbios “irán a esa declaración acompañados de sus abogados”. Y contarán con ellos, si alguna de las denuncias ciudadanas acaban en proceso judicial, “algo que no podemos descartar, tal como está el panorama”.
Los tres agentes expedientados “están descansando unos días” después del operativo especial de seguridad organizado durante las Jornada Mundial de la Juventud, pero se mantienen al tanto de las novedades sobre el expediente: “Quieren conocer todos los detalles para preparar su defensa”, añaden desde la Policía Nacional.
Dos de los tres agentes antidisturbios a los que el ministerio del Interior ha abierto expediente por su actuación en los disturbios ocurridos durante la manifestación anti-JMJ en Madrid, no se encontraban en el lugar de los hechos: estaban en otro sitio. Y ha mezclado imágenes de varios vídeos
as prisas por dar una respuesta institucional a las denuncias ciudadanas, junto con la presión desde Internet, han sido claves para cometer una serie de errores, más propios de películas como ‘Loca Academia de Policía’.
El miércoles, el director general de la Policía y la Guardia Civil, Francisco Javier Velázquez, ordenó la apertura de expedientes disciplinarios por falta grave a tres agentes de la Unidad de Intervención Policial (UIP), al considerar que “se extralimitaron en sus funciones” durante la actuación policial posterior a la concentración laica celebrada el día 18 en Madrid.
La decisión se tomó después de analizar las imágenes de varios vídeos, difundidos a través de Internet, en las que aparece un grupo de agentes cargando contra una joven que les había increpado, y contra un fotógrafo que había captado dicha actuación.
La bofetada que uno de los policías propinó a la manifestante provocó una oleada de denuncias por parte de otros asistentes a la marcha anti-Papa, lo que llevó al ministerio del Interior a tratar de paliarlo mediante la apertura de una investigación.
Dos de los tres agentes que han sido expedientados no se encontraban en el lugar de los hechos que aparecen en los vídeos analizados desde el ministerio. Interior ha confundido las identidades de los antidisturbios.
Estaban en Sol
Miembros cualificados de la Policía Nacional explican a ECD que dos de los tres policías sancionados “estaban en Sol, junto a cientos de agentes más, pero ni se acercaron a la calle donde estaban la chica y el fotógrafo que aparecen en los vídeos”. Lo pueden demostrar.
Además, uno de los agentes expedientados es una mujer que forma parte de la Unidad de Intervención Policial, “cuando en las imágenes subidas a Internet no aparece ninguna compañera, y sólo puede verse hombres”.
Esas fuentes explican que en la investigación “se han mezclado imágenes de varios vídeos, sin tener algunos de ellos nada que ver con la acción contra la manifestante y el fotógrafo que ha provocado la apertura de expediente por parte del ministerio.
Los tres agentes están descansando
Las fuentes consultadas por ECD explican que los tres agentes expedientados “saben desde la semana pasada que tendrán que prestar declaración ante un instructor y un secretario de la Dirección de Policía en las próximas fechas, pero aún no conocen los motivos exactos por los que se les ha citado, ya que no se les ha notificado nada formalmente”.
No obstante, los policías antidisturbios “irán a esa declaración acompañados de sus abogados”. Y contarán con ellos, si alguna de las denuncias ciudadanas acaban en proceso judicial, “algo que no podemos descartar, tal como está el panorama”.
Los tres agentes expedientados “están descansando unos días” después del operativo especial de seguridad organizado durante las Jornada Mundial de la Juventud, pero se mantienen al tanto de las novedades sobre el expediente: “Quieren conocer todos los detalles para preparar su defensa”, añaden desde la Policía Nacional.