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Difícil situación de estos profesionales en el País Vasco y Navarra
El "terrorismo de persecución" amenaza a los escoltas
Los escoltas que ejercen en el País Vasco y Navarra se encuentran preocupados por su futuro laboral. Su portavoz, Alberto Velasco, ha narrado a EL IMPARCIAL la situación de estos profesionales, víctimas de un "terrorismo de persecución" y sin certidumbre en el horizonte, especialmente desde la supuesta tregua etarra y la irrupción de Bildu.
Alberto López Marín
07-06-2011
"Tenga en cuenta que los cuerpos de intervención, hasta la propia Ertzaintza de tráfico, llevan la cara tapada. Nosotros no. Nos conocen en nuestros pueblos. Nos movemos en un entorno de terrorismo de persecución". Es la denuncia de Alberto Velasco, voz de los escoltas del País Vasco y Navarra y emisor de un comunicado que recuerda el papel de estos profesionales en estos territorios, así como que ellos también han sido y son víctimas.
"No queremos un trato preferencial o diferente al de cualquier ciudadano, pero las circunstancias nos obligan a aclarar que el futuro laboral de este colectivo es particularmente complicado. Los escoltas, perfectamente identificados por el entorno radical, no podremos acceder a un puesto de trabajo", expone un texto que habla de "maltrato" por parte de la Consejería de Interior del Gobierno vasco y del Ministerio que dirige Pérez Rubalcaba.
Velasco opina que ese "terrorismo de persecución" del que habla "existe y seguirá existiendo". En un contexto de bajas en apenas dos meses contempla una única solución: "Marcharnos de aquí". Viven "extorsión y amenazas", sufren pintadas en sus pueblos y se les hace duro quedarse sin empleo con un hogar y familia que mantener y sin que cesen los dedos acusadores que limitan retomar la vida laboral. "Tenemos miedo a qué va a pasar después", reconoce Velasco.
Ni Rodolfo Ares ni ningún miembro de otro partido político se ha reunido con ellos. Desde Madrid y Vitoria se toman decisiones que acatan las empresas pero que no se negocian en ningún caso con los afectados. "No nos explican qué está pasando y actúan con arbitrariedad", critica el escolta.
Preguntado por la amenaza de Eta, Velasco lamenta que "se ha retirado la escolta a muchas personas que sufren persecución" y señala que la situación se observa muy distinta según se presencie desde fuera o dentro del País Vasco o Navarra: "Una cosa es lo que parece y otra la que es. Quien haya estado en un acto de Bildu lo sabe. Son los mismos perros con diferente collar y puede haber un disgusto si las cosas no salen como ellos quieren", sentencia.
El "terrorismo de persecución" amenaza a los escoltas
Los escoltas que ejercen en el País Vasco y Navarra se encuentran preocupados por su futuro laboral. Su portavoz, Alberto Velasco, ha narrado a EL IMPARCIAL la situación de estos profesionales, víctimas de un "terrorismo de persecución" y sin certidumbre en el horizonte, especialmente desde la supuesta tregua etarra y la irrupción de Bildu.
Alberto López Marín
07-06-2011
"Tenga en cuenta que los cuerpos de intervención, hasta la propia Ertzaintza de tráfico, llevan la cara tapada. Nosotros no. Nos conocen en nuestros pueblos. Nos movemos en un entorno de terrorismo de persecución". Es la denuncia de Alberto Velasco, voz de los escoltas del País Vasco y Navarra y emisor de un comunicado que recuerda el papel de estos profesionales en estos territorios, así como que ellos también han sido y son víctimas.
"No queremos un trato preferencial o diferente al de cualquier ciudadano, pero las circunstancias nos obligan a aclarar que el futuro laboral de este colectivo es particularmente complicado. Los escoltas, perfectamente identificados por el entorno radical, no podremos acceder a un puesto de trabajo", expone un texto que habla de "maltrato" por parte de la Consejería de Interior del Gobierno vasco y del Ministerio que dirige Pérez Rubalcaba.
Velasco opina que ese "terrorismo de persecución" del que habla "existe y seguirá existiendo". En un contexto de bajas en apenas dos meses contempla una única solución: "Marcharnos de aquí". Viven "extorsión y amenazas", sufren pintadas en sus pueblos y se les hace duro quedarse sin empleo con un hogar y familia que mantener y sin que cesen los dedos acusadores que limitan retomar la vida laboral. "Tenemos miedo a qué va a pasar después", reconoce Velasco.
Ni Rodolfo Ares ni ningún miembro de otro partido político se ha reunido con ellos. Desde Madrid y Vitoria se toman decisiones que acatan las empresas pero que no se negocian en ningún caso con los afectados. "No nos explican qué está pasando y actúan con arbitrariedad", critica el escolta.
Preguntado por la amenaza de Eta, Velasco lamenta que "se ha retirado la escolta a muchas personas que sufren persecución" y señala que la situación se observa muy distinta según se presencie desde fuera o dentro del País Vasco o Navarra: "Una cosa es lo que parece y otra la que es. Quien haya estado en un acto de Bildu lo sabe. Son los mismos perros con diferente collar y puede haber un disgusto si las cosas no salen como ellos quieren", sentencia.
