La conflictividad en los bares de copas cae hasta un 80%|
“El mejor portero es el mejor torero”. Con estas palabras describió el gerente de la empresa Protalba Servicios Auxiliares SL, Javier Ruiz de la Rosa, a los controladores de los accesos de bares y discotecas de la ciudad, cuyas armas más importantes en el desarrollo de su trabajo son “la educación y la capacidad para mediar”.
Tras 12 años en el sector, la empresa de Ruiz de la Rosa gestiona el servicio de porteros en el 95 por ciento de los locales de copas de Albacete, aproximadamente en 60, mediante los servicios de unos 70 profesionales.
Profesionales que este empresario hizo hincapié en diferenciar de los vigilantes de seguridad, quienes precisó que requieren del título del Ministerio de Interior, que se logra a través de una serie de cursos y se obtiene en un promedio de seis meses. “Un vigilante no puede vender entradas, ni cambiar vasos; del mismo modo que un portero no puede retener a nadie, ni llevar esposas”, matizó.
Asimismo, y a pesar de admitir que existe un mínimo porcentaje de porteros que dañan la reputación del sector, sobre todo en las grandes ciudades, Ruiz de la Rosa incidió en la indefensión de los porteros, quienes “lo único que pueden hacer es mediar o intentar disuadir y, lo primero, llamar a la Policía, que normalmente en Albacete siempre tiene una rápida respuesta, de no más de 5 minutos”.
Entre los requisitos que esta empresa exige a los porteros o controladores de acceso, aseguró que no se precisa ninguna titulación, pero sí es necesario superar la entrevista realizada por un experto en recursos humanos, así como el reconocimiento físico y un curso de formación y prevención de riesgos laborales.
En este sentido, añadió las charlas que cada 6 meses proporciona a sus trabajadores sobre temas afines, como defensa personal o prevención de incidentes; además de clásicos, como tener una presencia adaptada al perfil. Ruiz de la Rosa desmintió que la mayoría de los porteros de la ciudad sean de otra nacionalidad y fijó la cifra en el 50 por ciento, eso sí, descartando la presencia femenina. “Aunque todos hablan perfectamente el castellano”.
“En menos de 10 días podemos dar de alta en la Seguridad Social a un nuevo trabajador en la categoría de controlador, conserje o portero, pero sólo un 10 por ciento de todos los entrevistados sirven para este trabajo”, subrayó; a la vez que resaltó el descenso que ha experimentado el número de incidencias en los últimos años.
Según sus palabras, la especialización del sector ha permitido que los incidentes de relativa importancia caigan en Albacete desde el centenar hasta la docena por año. “Durante los 5 o 6 primeros años habían más problemas. Pudimos tener más de 200 juicios, pero los porteros cada vez están mejor preparados”, manifestó.
De hecho, este año todavía no se había producido ningún conflicto a las puertas de los locales de copas, hasta que este fin de semana hubo dos disputas, que acabaron con clientes y porteros en la Comisaría, tal y como lamentó Ruiz de la Rosa; antes de asegurar que no existe una frecuencia en este tipo de hechos, aunque normalmente periodos vacacionales como Navidad, Carnaval, Semana Santa o Feria son más dados a las disputas.
“La peleas no se producen a primera hora, siempre son a las 05.00 o las 06.00 horas, cuando la gente va puesta de alcohol y droga. Pero, en general, Albacete es una ciudad bastante tranquila”, reiteró.
Algo que argumentó en que no se recuerda “ningún caso sonado, ni sanciones de importancia”. Además, apuntó que “los porteros no quieren problemas y, sobre todo, quieren pasar desapercibidos”, porque tener antecedentes penales puede suponer el ingreso cautelar en prisión ante un posible juicio, donde las cámaras de seguridad “son testigos esenciales”.
Al hilo de lo que reconoció la corta vida profesional de los porteros, que no suele superar la década, porque “este es un trabajo que quema mucho y, una vez que se casan y tienen hijos, lo dejan por el riesgo que supone”. De hecho, la edad de los controladores se establece entre los 25 y los 45 años. Gente joven que compatibiliza su trabajo diario con éste durante los fines de semana, para obtener un dinero extra que oscila entre los 600 y los 800 euros; o bien el caso del otro 50 por ciento de los trabajadores de Protalba Servicios Auxiliares SL, que cuenta con contratos fijos y una remuneración mensual de entre 1.200 y 1.400 euros.
http://eldiadigital.es/not/15928/la_conflictividad_en_los_bares_de_copas_cae_hasta
“El mejor portero es el mejor torero”. Con estas palabras describió el gerente de la empresa Protalba Servicios Auxiliares SL, Javier Ruiz de la Rosa, a los controladores de los accesos de bares y discotecas de la ciudad, cuyas armas más importantes en el desarrollo de su trabajo son “la educación y la capacidad para mediar”.
Tras 12 años en el sector, la empresa de Ruiz de la Rosa gestiona el servicio de porteros en el 95 por ciento de los locales de copas de Albacete, aproximadamente en 60, mediante los servicios de unos 70 profesionales.
Profesionales que este empresario hizo hincapié en diferenciar de los vigilantes de seguridad, quienes precisó que requieren del título del Ministerio de Interior, que se logra a través de una serie de cursos y se obtiene en un promedio de seis meses. “Un vigilante no puede vender entradas, ni cambiar vasos; del mismo modo que un portero no puede retener a nadie, ni llevar esposas”, matizó.
Asimismo, y a pesar de admitir que existe un mínimo porcentaje de porteros que dañan la reputación del sector, sobre todo en las grandes ciudades, Ruiz de la Rosa incidió en la indefensión de los porteros, quienes “lo único que pueden hacer es mediar o intentar disuadir y, lo primero, llamar a la Policía, que normalmente en Albacete siempre tiene una rápida respuesta, de no más de 5 minutos”.
Entre los requisitos que esta empresa exige a los porteros o controladores de acceso, aseguró que no se precisa ninguna titulación, pero sí es necesario superar la entrevista realizada por un experto en recursos humanos, así como el reconocimiento físico y un curso de formación y prevención de riesgos laborales.
En este sentido, añadió las charlas que cada 6 meses proporciona a sus trabajadores sobre temas afines, como defensa personal o prevención de incidentes; además de clásicos, como tener una presencia adaptada al perfil. Ruiz de la Rosa desmintió que la mayoría de los porteros de la ciudad sean de otra nacionalidad y fijó la cifra en el 50 por ciento, eso sí, descartando la presencia femenina. “Aunque todos hablan perfectamente el castellano”.
“En menos de 10 días podemos dar de alta en la Seguridad Social a un nuevo trabajador en la categoría de controlador, conserje o portero, pero sólo un 10 por ciento de todos los entrevistados sirven para este trabajo”, subrayó; a la vez que resaltó el descenso que ha experimentado el número de incidencias en los últimos años.
Según sus palabras, la especialización del sector ha permitido que los incidentes de relativa importancia caigan en Albacete desde el centenar hasta la docena por año. “Durante los 5 o 6 primeros años habían más problemas. Pudimos tener más de 200 juicios, pero los porteros cada vez están mejor preparados”, manifestó.
De hecho, este año todavía no se había producido ningún conflicto a las puertas de los locales de copas, hasta que este fin de semana hubo dos disputas, que acabaron con clientes y porteros en la Comisaría, tal y como lamentó Ruiz de la Rosa; antes de asegurar que no existe una frecuencia en este tipo de hechos, aunque normalmente periodos vacacionales como Navidad, Carnaval, Semana Santa o Feria son más dados a las disputas.
“La peleas no se producen a primera hora, siempre son a las 05.00 o las 06.00 horas, cuando la gente va puesta de alcohol y droga. Pero, en general, Albacete es una ciudad bastante tranquila”, reiteró.
Algo que argumentó en que no se recuerda “ningún caso sonado, ni sanciones de importancia”. Además, apuntó que “los porteros no quieren problemas y, sobre todo, quieren pasar desapercibidos”, porque tener antecedentes penales puede suponer el ingreso cautelar en prisión ante un posible juicio, donde las cámaras de seguridad “son testigos esenciales”.
Al hilo de lo que reconoció la corta vida profesional de los porteros, que no suele superar la década, porque “este es un trabajo que quema mucho y, una vez que se casan y tienen hijos, lo dejan por el riesgo que supone”. De hecho, la edad de los controladores se establece entre los 25 y los 45 años. Gente joven que compatibiliza su trabajo diario con éste durante los fines de semana, para obtener un dinero extra que oscila entre los 600 y los 800 euros; o bien el caso del otro 50 por ciento de los trabajadores de Protalba Servicios Auxiliares SL, que cuenta con contratos fijos y una remuneración mensual de entre 1.200 y 1.400 euros.
http://eldiadigital.es/not/15928/la_conflictividad_en_los_bares_de_copas_cae_hasta