Los perros de la Guardia Civil se adaptan a los nuevos tiempos
María Ángeles Moya viernes, 21 de enero de 2011
Los nuevos riesgos para la seguridad que surgen prácticamente a diario implican nuevos desafíos para las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Y esos retos a los que tienen que hacer frente, como garantes de la seguridad interior del estado, conllevan la necesidad de contar con nuevas capacidades.
Con ese planteamiento la Guardia Civil ha decidido adiestrar a sus unidades caninas en nuevas modalidades de detección para luchar no sólo contra potenciales actuaciones delictivas que conlleven un riesgo para la integridad física de las personas, sino también para combatir el fraude económico o para colaborar en la protección de la naturaleza.
Detectar explosivos en personas, grandes cantidades de papel moneda de curso legal ocultas en todo tipo de equipajes, o lugares en los que se ha iniciado un incendio serán algunas de las capacidades que tendrán en el futuro los perros del Servicio Cinológico de la Benemérita, una unidad que se encarga de gestionar todo lo referente al empleo del perro policía en la Guardia Civil.
Hasta ahora, el Servicio Cinológico contaba con las especialidades de Seguridad y Rescate, perros detectores de explosivos y perros detectores de drogas. A partir de este momento, los canes comenzarán a ser instruidos en nuevas modalidades de detección para incrementar la prevención y la seguridad.
Cinco serán las nuevas especialidades: detección de explosivos en personas, detección de dinero, detección de cadáveres enterrados y sumergidos, detección de iniciadores de incendios y detección de cebos envenenados. En el primero de los casos, los perros de la Guardia Civil adquirirán capacidades para detectar explosivos adosados al cuerpo de una persona con la finalidad de hacerlos explosionar, o simplemente cuando sean transportados para colocarlos en otro sitio.
A este respecto cabe señalar que precisamente los ataques suicidas, en los que los terroristas explosionan potentes cargas adosadas a sus cuerpos, son una práctica habitual del islamismo más radical y violento, representado por el salafismo yihadista, que considera la violencia como un deber religioso para devolver al mundo musulmán la época de esplendor del profeta. Es, por tanto, fundamental contar con capacidades para combatir esta amenaza, que no sólo se produce en Afganistán, centro neurálgico del salafismo reencarnado en Al Qaeda; recordemos los ataques suicidas que se produjeron en el metro de Moscú en marzo de 2010, en los que murieron más de medio centenar de personas.
En relación con la especialidad en detección de dinero, los perros estarán preparados para encontrar papel moneda de curso legal y en cantidades grandes, transportado en todo tipo de equipaje. Además de actuar en fronteras, puertos y aeropuertos, los canes serán capaces de cumplir con su misión en domicilios, exteriores... en el marco de operaciones de delincuencia organizada o terrorismo. Y, en el futuro, también podrán detectar este material sobre las personas, según informa la Guardia Civil. En relación con esta nueva especialidad, no hay que olvidar que precisamente uno de los objetivos que persigue la lucha contra el crimen organizado (o delincuencia organizada) es atajar la financiación de estas organizaciones delictivas.
La detección de cadáveres enterrados y sumergidos es una modalidad que nació hace cuatro años con la finalidad de dar apoyo tanto a las unidades operativas como de investigación. Los perros dedicados a estas tareas están especializados en la búsqueda de cadáveres y restos cadavéricos enterrados o sumergidos en agua, pudiendo encontrar también rastros de sangre en escenarios de crímenes después de transcurridos largos periodos de tiempo y haber sido limpiada la zona, tanto en sitios cerrados como en campo abierto.
Por último, la detección de iniciadores de incendios consiste en localizar los puntos donde exista alguna materia susceptible de haber generado el inicio de un incendio, mientras que la detección de cebos envenenados permitirá a los perros detectar las posibles muertes por envenenamiento de animales silvestres mediante el uso de cebos dentro de su propio entorno natural.
Servicio Cinológico de la Guardia Civil
El Servicio Cinológico es el organismo que se encarga de gestionar todo lo referente a la utilización del perro policía en la Guardia Civil.
En 1949 se crean puestos y destacamentos con perros para perseguir de forma más organizada a bandoleros y malhechores, y tener mejor control en zonas de fronteras y costas.
Posteriormente, en 1951 se crea la Escuela de Adiestramiento de Perros de la Guardia Civil y queda ubicada desde esa fecha en El Pardo (Madrid). La estructura actual del Servicio Cinológico quedó definitivamente configurada en 1982, con la misión de apoyar a las diferentes unidades operativas en el cumplimiento de los servicios que tienen encomendados.
http://noticiasvigilantes.foroactivo.com/t10838-los-perros-de-la-guardia-civil-se-adaptan-a-los-nuevos-tiempos
María Ángeles Moya viernes, 21 de enero de 2011
Los nuevos riesgos para la seguridad que surgen prácticamente a diario implican nuevos desafíos para las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Y esos retos a los que tienen que hacer frente, como garantes de la seguridad interior del estado, conllevan la necesidad de contar con nuevas capacidades.
Con ese planteamiento la Guardia Civil ha decidido adiestrar a sus unidades caninas en nuevas modalidades de detección para luchar no sólo contra potenciales actuaciones delictivas que conlleven un riesgo para la integridad física de las personas, sino también para combatir el fraude económico o para colaborar en la protección de la naturaleza.
Detectar explosivos en personas, grandes cantidades de papel moneda de curso legal ocultas en todo tipo de equipajes, o lugares en los que se ha iniciado un incendio serán algunas de las capacidades que tendrán en el futuro los perros del Servicio Cinológico de la Benemérita, una unidad que se encarga de gestionar todo lo referente al empleo del perro policía en la Guardia Civil.
Hasta ahora, el Servicio Cinológico contaba con las especialidades de Seguridad y Rescate, perros detectores de explosivos y perros detectores de drogas. A partir de este momento, los canes comenzarán a ser instruidos en nuevas modalidades de detección para incrementar la prevención y la seguridad.
Cinco serán las nuevas especialidades: detección de explosivos en personas, detección de dinero, detección de cadáveres enterrados y sumergidos, detección de iniciadores de incendios y detección de cebos envenenados. En el primero de los casos, los perros de la Guardia Civil adquirirán capacidades para detectar explosivos adosados al cuerpo de una persona con la finalidad de hacerlos explosionar, o simplemente cuando sean transportados para colocarlos en otro sitio.
A este respecto cabe señalar que precisamente los ataques suicidas, en los que los terroristas explosionan potentes cargas adosadas a sus cuerpos, son una práctica habitual del islamismo más radical y violento, representado por el salafismo yihadista, que considera la violencia como un deber religioso para devolver al mundo musulmán la época de esplendor del profeta. Es, por tanto, fundamental contar con capacidades para combatir esta amenaza, que no sólo se produce en Afganistán, centro neurálgico del salafismo reencarnado en Al Qaeda; recordemos los ataques suicidas que se produjeron en el metro de Moscú en marzo de 2010, en los que murieron más de medio centenar de personas.
En relación con la especialidad en detección de dinero, los perros estarán preparados para encontrar papel moneda de curso legal y en cantidades grandes, transportado en todo tipo de equipaje. Además de actuar en fronteras, puertos y aeropuertos, los canes serán capaces de cumplir con su misión en domicilios, exteriores... en el marco de operaciones de delincuencia organizada o terrorismo. Y, en el futuro, también podrán detectar este material sobre las personas, según informa la Guardia Civil. En relación con esta nueva especialidad, no hay que olvidar que precisamente uno de los objetivos que persigue la lucha contra el crimen organizado (o delincuencia organizada) es atajar la financiación de estas organizaciones delictivas.
La detección de cadáveres enterrados y sumergidos es una modalidad que nació hace cuatro años con la finalidad de dar apoyo tanto a las unidades operativas como de investigación. Los perros dedicados a estas tareas están especializados en la búsqueda de cadáveres y restos cadavéricos enterrados o sumergidos en agua, pudiendo encontrar también rastros de sangre en escenarios de crímenes después de transcurridos largos periodos de tiempo y haber sido limpiada la zona, tanto en sitios cerrados como en campo abierto.
Por último, la detección de iniciadores de incendios consiste en localizar los puntos donde exista alguna materia susceptible de haber generado el inicio de un incendio, mientras que la detección de cebos envenenados permitirá a los perros detectar las posibles muertes por envenenamiento de animales silvestres mediante el uso de cebos dentro de su propio entorno natural.
Servicio Cinológico de la Guardia Civil
El Servicio Cinológico es el organismo que se encarga de gestionar todo lo referente a la utilización del perro policía en la Guardia Civil.
En 1949 se crean puestos y destacamentos con perros para perseguir de forma más organizada a bandoleros y malhechores, y tener mejor control en zonas de fronteras y costas.
Posteriormente, en 1951 se crea la Escuela de Adiestramiento de Perros de la Guardia Civil y queda ubicada desde esa fecha en El Pardo (Madrid). La estructura actual del Servicio Cinológico quedó definitivamente configurada en 1982, con la misión de apoyar a las diferentes unidades operativas en el cumplimiento de los servicios que tienen encomendados.
http://noticiasvigilantes.foroactivo.com/t10838-los-perros-de-la-guardia-civil-se-adaptan-a-los-nuevos-tiempos