"Nosotros seguimos amenazados"
Una semana después de que ETA declarara el alto el fuego, amenazados del PP y del PSE señalan que hasta que no se demuestre el parón de la actividad de la organización, no tienen pensado renunciar a esas "sombras" que les siguen a todas partes.
J. Arretxe y Efe
- Lunes, 17 de Enero de 2011 - Actualizado a las 05:33h.
Dos escoltas protegen a una persona en el paseo de La Concha, en Donostia. (EFE)
una semana después de que ETA declarara un "alto el fuego permanente y de carácter general, que puede ser verificado por la comunidad internacional", el día a día de los amenazados y escoltados en Euskadi no ha variado.
El cambio de recorrido es la rutina, las protecciones continúan a la espalda y las sombras vuelven a esperar en el portal cada mañana. El concejal del PSE en el Ayuntamiento de Donostia Enrique Ramos lo relataba el pasado martes en su blog.
En la nota Comunicando, donde valoraba el anuncio de ETA, reconocía que el día siguiente a la declaración, cuando bajó de casa y salió del portal, "había dos personas" esperándole: "No eran un par de amiguetes para ir a desayunar, sino mis escoltas. Esto es así de fácil".
El comunicado de ETA no pilló "por sorpresa" a nadie. "Decepción" o "aburrimiento" son dos términos a los que aluden el candidato a diputado general del PP y secretario general de la formación en Gipuzkoa, Juan Carlos Cano, y el edil socialista en Zarautz Patxi Elola.
El primero no oculta que estaría "encantado, pero tanto como para tirar cohetes de que me digan mañana mismo que no hay riesgo y de que me retiren la escolta. Sería feliz". Pero la realidad por ahora, cuenta, es otra. "En estos momentos no me quiero creer nada porque luego la desilusión es mayor, la caída es peor y con ETA siempre ha habido caída".
La principal razón que arguye Cano, con escolta desde 1997, para no pensar en siquiera pedir una retirada de la protección se remonta a 1998 o a 2006. "Los que llevamos tiempo en esta triste y dura batalla sabemos que es durante las treguas cuando ETA recaba información, es triste pero es así".
El candidato a diputado general del PP explica que "hoy o mañana ETA no parece que mate, pero tenemos que ser responsables como para saber que ETA ha aprovechado sus treguas o recordar que en 2006 el Gobierno mismo decía que estaba verificando la situación".
Ertzaintza, sin cambios
Interior mantiene la protección
De hecho, la Ertzaintza e Interior ya señalaron durante las primeras horas tras la declaración de alto el fuego que no hay "sobre la mesa" ninguna variación de la política de protecciones.
El Plan de Reorganización y Modernización de la Ertzaintza que presentó el consejero Rodolfo Ares el pasado mes en el Parlamento ya aborda la situación del posible final de la violencia terrorista en Euskadi, pero al margen no se plantea nada especial.
Tampoco lo hace el edil socialista zarauztarra Patxi Elola. El comunicado "no aporta nada nuevo a mi situación. No sé leer entre líneas y hasta que no sea una decisión definitiva y contrastada por quien tiene que verificar, Interior, el CNI o quien sea, nosotros seguimos amenazados".
Como Cano, Elola pone su alerta en el periodo de "pseudotreguas"y recuerda cómo "en la de 1998 me quemaron el almacén con la furgoneta, la maquinaria y todo lo que había dentro y en 2006, le intentaron quemar el coche a mi hermano. ¿Qué treguas son esas?".
Tras el comunicado del lunes y dos detenciones por presunta vinculación con ETA de la madrugada del martes (en Ziburu y Zarautz, esta última después puesta en libertad), Elola afirma que la situación de ese segundo día "no fue parecida sino peor, porque tras las detenciones, el pueblo amaneció otra vez con pancartas y carteles favorables" a ellos. "Ha sido un día de tener mayor precaución, tanto yo como mis escoltas".
Como reconocía Enrique Ramos, "el día en que los miles de personas amenazadas por ETA puedan salir a la calle solos y solas a comprar el pan, tomarse un café, llevar a su hijo o hija a la ikastola o simplemente pasear al sol aburriéndose sin que haya una sombra detrás, ese día se habrá terminado". Ese día, como diría el presidente de los socialistas vascos, Jesús Eguiguren, "la nieve habrá desaparecido".
Una semana después de que ETA declarara el alto el fuego, amenazados del PP y del PSE señalan que hasta que no se demuestre el parón de la actividad de la organización, no tienen pensado renunciar a esas "sombras" que les siguen a todas partes.
J. Arretxe y Efe
- Lunes, 17 de Enero de 2011 - Actualizado a las 05:33h.
Dos escoltas protegen a una persona en el paseo de La Concha, en Donostia. (EFE)
una semana después de que ETA declarara un "alto el fuego permanente y de carácter general, que puede ser verificado por la comunidad internacional", el día a día de los amenazados y escoltados en Euskadi no ha variado.
El cambio de recorrido es la rutina, las protecciones continúan a la espalda y las sombras vuelven a esperar en el portal cada mañana. El concejal del PSE en el Ayuntamiento de Donostia Enrique Ramos lo relataba el pasado martes en su blog.
En la nota Comunicando, donde valoraba el anuncio de ETA, reconocía que el día siguiente a la declaración, cuando bajó de casa y salió del portal, "había dos personas" esperándole: "No eran un par de amiguetes para ir a desayunar, sino mis escoltas. Esto es así de fácil".
El comunicado de ETA no pilló "por sorpresa" a nadie. "Decepción" o "aburrimiento" son dos términos a los que aluden el candidato a diputado general del PP y secretario general de la formación en Gipuzkoa, Juan Carlos Cano, y el edil socialista en Zarautz Patxi Elola.
El primero no oculta que estaría "encantado, pero tanto como para tirar cohetes de que me digan mañana mismo que no hay riesgo y de que me retiren la escolta. Sería feliz". Pero la realidad por ahora, cuenta, es otra. "En estos momentos no me quiero creer nada porque luego la desilusión es mayor, la caída es peor y con ETA siempre ha habido caída".
La principal razón que arguye Cano, con escolta desde 1997, para no pensar en siquiera pedir una retirada de la protección se remonta a 1998 o a 2006. "Los que llevamos tiempo en esta triste y dura batalla sabemos que es durante las treguas cuando ETA recaba información, es triste pero es así".
El candidato a diputado general del PP explica que "hoy o mañana ETA no parece que mate, pero tenemos que ser responsables como para saber que ETA ha aprovechado sus treguas o recordar que en 2006 el Gobierno mismo decía que estaba verificando la situación".
Ertzaintza, sin cambios
Interior mantiene la protección
De hecho, la Ertzaintza e Interior ya señalaron durante las primeras horas tras la declaración de alto el fuego que no hay "sobre la mesa" ninguna variación de la política de protecciones.
El Plan de Reorganización y Modernización de la Ertzaintza que presentó el consejero Rodolfo Ares el pasado mes en el Parlamento ya aborda la situación del posible final de la violencia terrorista en Euskadi, pero al margen no se plantea nada especial.
Tampoco lo hace el edil socialista zarauztarra Patxi Elola. El comunicado "no aporta nada nuevo a mi situación. No sé leer entre líneas y hasta que no sea una decisión definitiva y contrastada por quien tiene que verificar, Interior, el CNI o quien sea, nosotros seguimos amenazados".
Como Cano, Elola pone su alerta en el periodo de "pseudotreguas"y recuerda cómo "en la de 1998 me quemaron el almacén con la furgoneta, la maquinaria y todo lo que había dentro y en 2006, le intentaron quemar el coche a mi hermano. ¿Qué treguas son esas?".
Tras el comunicado del lunes y dos detenciones por presunta vinculación con ETA de la madrugada del martes (en Ziburu y Zarautz, esta última después puesta en libertad), Elola afirma que la situación de ese segundo día "no fue parecida sino peor, porque tras las detenciones, el pueblo amaneció otra vez con pancartas y carteles favorables" a ellos. "Ha sido un día de tener mayor precaución, tanto yo como mis escoltas".
Como reconocía Enrique Ramos, "el día en que los miles de personas amenazadas por ETA puedan salir a la calle solos y solas a comprar el pan, tomarse un café, llevar a su hijo o hija a la ikastola o simplemente pasear al sol aburriéndose sin que haya una sombra detrás, ese día se habrá terminado". Ese día, como diría el presidente de los socialistas vascos, Jesús Eguiguren, "la nieve habrá desaparecido".