Ex-trabajadores de “Escualo Seguridad” y “Jampe Serviman” denuncian acoso por parte de la empresa para que se fueran
Han llevado este asunto ante el Ministerio de Trabajo y CEMAC y denuncian la creación de otra empresa para justificar los despidos
Ex-trabajadores de la empresa de seguridad “Escualo” y su auxiliar “Jampe Serviman”, que es la que lleva los servicios de mantenimiento de los parques municipales o los depósitos de agua del Pinar de Hierro entre otros, han denunciado a PUENTE CHICO el acoso al que se han visto sometidos por sus jefes tras la destitución de la anterior directiva, que les ha llevado a su despido. También denuncian la creación de otra empresa para prestar sus servicios a Chiclana Natural en lugares concretos, cuando pertenece a los mismos dueños y los vigilantes son los mismos de antes y con los uniformes de la empresa de siempre. Estos vigilantes han denunciado el caso al Ministerio de Trabajo.
Todo esto comenzó tras la destitución de la antigua directiva de “Escualo Seguridad”. La empresa es de cuatro hermanos, uno de ellos era el gerente, lo ha sido durante muchos años, desde que se creó esta empresa. Esa destitución fue en octubre de 2009, enterándose los trabajadores en diciembre, dos meses después. Los que cogieron las riendas de Escualo Seguridad “dijeron que todo iba a seguir igual que hasta entonces, pero eran nada más que puras mentiras”.
Según denuncian “comenzaron los acosos a los trabajadores, a los que habían sido de confianza del anterior gerente, entre ellos un compañero, José Antonio Muñoz Rojas, que le pasó exactamente lo mismo que a mí, Francisco Javier Fernández Ayán”.
La persecución fue tal “que nos inspeccionaba día sí, y día también un señor que en la empresa todos creíamos que legalmente era inspector de “Jampe Serviman” (empresa auxiliar de Escualo que lleva los servicios de mantenimiento de los parques municipales como Santa Ana, la ermita, Huerta Rosario y La Soledad, los depósitos de agua del Pinar de Hierro, etc.)”.
El 29 de diciembre de 2009 se reúnen con Juan José Martínez Rivas, el actual administrador de las dos empresas, “Escualo Seguridad” y “Jampe Serviman”, ya que,
además de las dos pagas extraordinarias prorrateadas en la nomina, “nos daba una gratificación extraordinaria por Navidad. Nos dice que sí, que como se había dado habitualmente continuarían haciéndolo, que seguiría siendo una empresa seria como hasta ahora, que cumplía con sus trabajadores, pero que tenía que hablarlo con el actual gerente, Antonio Martínez Rivas”.
EXCEDENCIA
Les citó para el 4 de enero de 2010 “para que cobrásemos dicha paga extraordinaria. Fuimos Muñoz Rojas y yo el día acordado y esta vez nos recibió el gerente, Antonio Martínez. Nos comunicó que no se darían gratificaciones extraordinarias a nadie, pues no sabían quién se la merecía y quién no. Eso significaba que llegaría el día 6 de enero sin poder hacer regalos de Reyes a nuestras familias”.
Siguieron trabajando “y continuó el acoso de las inspecciones por parte del inspector, Fernando Rodríguez Ramírez, que luego nos enteramos que ni tiene contrato con “Jampe Serviman”, ni está legalizada su situación como inspector de la empresa”. El acoso “nos llevó a reunirnos y plantearnos la posibilidad de dejar la empresa. Fuimos a hablar con el anterior gerente, el que había sido sustituido, el cual nos aconsejó que pidiésemos una excedencia y nos fuésemos a trabajar a otra empresa”.
Esa excedencia la pidieron por cuatro meses “pensando que las aguas volverían a su cauce y dejarían de acosarnos con repetidas inspecciones”. La excedencia comenzó el 29 de enero de 2010 y terminaba el 28 de mayo. El 20 de abril se le envió un burofax pidiéndole una prórroga por otros cuatro meses, negándose a recibirlo.
“Como vimos que no querían saber nada de nosotros -manifiestan los afectados-, le volvimos a enviar dos burofax más, pidiéndole los cuadrantes de servicios para saber dónde teníamos que ir, pues ni nos querían recibir en las instalaciones, ya que nos decían que si entrábamos nos denunciarían a la Guardia Civil, e ignorando nuestras peticiones legales, que es volver a nuestros puestos de trabajo”.
DENUNCIA ANTE EL MINISTERIO DE TRABAJO
Por todo esto, lo denunciaron ante el Ministerio de Trabajo y contrataron abogado para tramitarlo por el CEMAC. Pusieron cinco denuncias en el Ministerio. Sin que los trabajadores tuvieran conocimiento crearon una segunda empresa de auxiliares como “Jampe Serviman”, Creaciones Empresariales del Sur, (CESUR): “Están desviando estos servicios a esa empresa para justificar que nuestros puestos vacantes están ocupados y así estar legalmente cubiertos para que no podamos hacer nada contra ellos”.
Hace unos meses tuvo lugar la renovación de los servicios auxiliares de estos parques municipales y la empresa que se los llevó fue “CESUR”, o sea, que ya no tiene asignada esos servicios “Jampe Serviman”, “pero los parques lo siguen montando personal con contrato de “Jampe Serviman” y están uniformados con logotipos de esta empresa, así que fuimos a hablar con Chiclana Natural para que nos diesen información, pero nos remitió un comunicado en el que dice que nosotros no somos quién ni estamos avalados para recibir esa información”.
Al tratarse de dinero público miraron en la web municipal, pero no aparece nada, como tampoco ha salido en ningún BOE, BOJA o BOP, “por lo que pensamos que se está cometiendo una ilegalidad con nosotros, pues el Ayuntamiento, de forma indirecta, está permitiendo que esta empresa nos haga un acoso laboral hasta aburrirnos y que decidamos irnos perdiendo nuestros derechos después estar trabajando allí tantos años al servicio de Jampe Serviman”.
DESPIDO IMPROCEDENTE
Otro trabajador, Lázaro Candón de Alba, también ha sido despedido, pero ante la denuncia formulada la empresa aceptó despido improcedente y le abonó algo más de 3000 euros. En la madrugada del pasado 1 de octubre, tras finalizar su servicio en el parque de Santa Ana, entre las 22,00 y 02,30 de la mañana, se dirigió como es habitual a la Policía Local para hacer entrega del parte de incidencias. Habiendo terminado su horario de trabajo se acercó hasta la Feria de Muestras.
Le preguntó a un compañero que cómo iba el servicio y cómo se montaban “en previsión de que en los días siguientes fuera enviado allí y tener información para hacer mi trabajo correctamente, respondiéndome con mal tono que sólo montaban servicio los que estaban, que no iría nadie más, por lo que me fui”.
Tres días más tarde, al acudir al parque Santa Ana a realizar su trabajo, el inspector de servicio “me hace entrega de una carta la cual me dicen que estoy despedido por una falta muy grave y en ella firman como testigos tres vigilantes de seguridad”.
GRABACIÓN SALVADORA
Al día siguiente se acercó a las dependencias de Escualo Seguridad para esclarecer lo sucedido pero nadie le quiso recibir. Buscó un abogado laboralista y lo denunció al CEMAC.
En la carta de despido los motivos aducidos son pueriles en algunos casos y grave en otro, pues dicen que intentó entrar de forma ilícita al recinto, cuando en ningún momento hizo algo que llevara a pensar algo así. Se limitó a preguntar por los servicios y se marchó. Lo bueno para Candón es que una cámara de la Policía grabó la secuencia y no se ve que hiciera algo ilícito.
“Ahora me encuentro en situación de desempleo por una falsa acusación que hizo un compañero y que firman tres vigilantes de seguridad –manifiesta Candón-. Día tras día, me pregunto qué he hecho para que se me trate tan vejatoriamente y si para conservar el trabajo he de vender a un compañero. ¿Qué hubiera ocurrido de no existir la grabación? ¿Qué futuro me espera con el actual nivel de paro?”.
Sólo son tres de los varios ejemplos que hay. Los denunciantes se sorprenden de que el Ayuntamiento no tome cartas en el asunto, porque son varias las irregularidades cometidas, algunas de ellas graves.
http://puentechico1.blogspot.com/
Han llevado este asunto ante el Ministerio de Trabajo y CEMAC y denuncian la creación de otra empresa para justificar los despidos
Ex-trabajadores de la empresa de seguridad “Escualo” y su auxiliar “Jampe Serviman”, que es la que lleva los servicios de mantenimiento de los parques municipales o los depósitos de agua del Pinar de Hierro entre otros, han denunciado a PUENTE CHICO el acoso al que se han visto sometidos por sus jefes tras la destitución de la anterior directiva, que les ha llevado a su despido. También denuncian la creación de otra empresa para prestar sus servicios a Chiclana Natural en lugares concretos, cuando pertenece a los mismos dueños y los vigilantes son los mismos de antes y con los uniformes de la empresa de siempre. Estos vigilantes han denunciado el caso al Ministerio de Trabajo.
Todo esto comenzó tras la destitución de la antigua directiva de “Escualo Seguridad”. La empresa es de cuatro hermanos, uno de ellos era el gerente, lo ha sido durante muchos años, desde que se creó esta empresa. Esa destitución fue en octubre de 2009, enterándose los trabajadores en diciembre, dos meses después. Los que cogieron las riendas de Escualo Seguridad “dijeron que todo iba a seguir igual que hasta entonces, pero eran nada más que puras mentiras”.
Según denuncian “comenzaron los acosos a los trabajadores, a los que habían sido de confianza del anterior gerente, entre ellos un compañero, José Antonio Muñoz Rojas, que le pasó exactamente lo mismo que a mí, Francisco Javier Fernández Ayán”.
La persecución fue tal “que nos inspeccionaba día sí, y día también un señor que en la empresa todos creíamos que legalmente era inspector de “Jampe Serviman” (empresa auxiliar de Escualo que lleva los servicios de mantenimiento de los parques municipales como Santa Ana, la ermita, Huerta Rosario y La Soledad, los depósitos de agua del Pinar de Hierro, etc.)”.
El 29 de diciembre de 2009 se reúnen con Juan José Martínez Rivas, el actual administrador de las dos empresas, “Escualo Seguridad” y “Jampe Serviman”, ya que,
además de las dos pagas extraordinarias prorrateadas en la nomina, “nos daba una gratificación extraordinaria por Navidad. Nos dice que sí, que como se había dado habitualmente continuarían haciéndolo, que seguiría siendo una empresa seria como hasta ahora, que cumplía con sus trabajadores, pero que tenía que hablarlo con el actual gerente, Antonio Martínez Rivas”.
EXCEDENCIA
Les citó para el 4 de enero de 2010 “para que cobrásemos dicha paga extraordinaria. Fuimos Muñoz Rojas y yo el día acordado y esta vez nos recibió el gerente, Antonio Martínez. Nos comunicó que no se darían gratificaciones extraordinarias a nadie, pues no sabían quién se la merecía y quién no. Eso significaba que llegaría el día 6 de enero sin poder hacer regalos de Reyes a nuestras familias”.
Siguieron trabajando “y continuó el acoso de las inspecciones por parte del inspector, Fernando Rodríguez Ramírez, que luego nos enteramos que ni tiene contrato con “Jampe Serviman”, ni está legalizada su situación como inspector de la empresa”. El acoso “nos llevó a reunirnos y plantearnos la posibilidad de dejar la empresa. Fuimos a hablar con el anterior gerente, el que había sido sustituido, el cual nos aconsejó que pidiésemos una excedencia y nos fuésemos a trabajar a otra empresa”.
Esa excedencia la pidieron por cuatro meses “pensando que las aguas volverían a su cauce y dejarían de acosarnos con repetidas inspecciones”. La excedencia comenzó el 29 de enero de 2010 y terminaba el 28 de mayo. El 20 de abril se le envió un burofax pidiéndole una prórroga por otros cuatro meses, negándose a recibirlo.
“Como vimos que no querían saber nada de nosotros -manifiestan los afectados-, le volvimos a enviar dos burofax más, pidiéndole los cuadrantes de servicios para saber dónde teníamos que ir, pues ni nos querían recibir en las instalaciones, ya que nos decían que si entrábamos nos denunciarían a la Guardia Civil, e ignorando nuestras peticiones legales, que es volver a nuestros puestos de trabajo”.
DENUNCIA ANTE EL MINISTERIO DE TRABAJO
Por todo esto, lo denunciaron ante el Ministerio de Trabajo y contrataron abogado para tramitarlo por el CEMAC. Pusieron cinco denuncias en el Ministerio. Sin que los trabajadores tuvieran conocimiento crearon una segunda empresa de auxiliares como “Jampe Serviman”, Creaciones Empresariales del Sur, (CESUR): “Están desviando estos servicios a esa empresa para justificar que nuestros puestos vacantes están ocupados y así estar legalmente cubiertos para que no podamos hacer nada contra ellos”.
Hace unos meses tuvo lugar la renovación de los servicios auxiliares de estos parques municipales y la empresa que se los llevó fue “CESUR”, o sea, que ya no tiene asignada esos servicios “Jampe Serviman”, “pero los parques lo siguen montando personal con contrato de “Jampe Serviman” y están uniformados con logotipos de esta empresa, así que fuimos a hablar con Chiclana Natural para que nos diesen información, pero nos remitió un comunicado en el que dice que nosotros no somos quién ni estamos avalados para recibir esa información”.
Al tratarse de dinero público miraron en la web municipal, pero no aparece nada, como tampoco ha salido en ningún BOE, BOJA o BOP, “por lo que pensamos que se está cometiendo una ilegalidad con nosotros, pues el Ayuntamiento, de forma indirecta, está permitiendo que esta empresa nos haga un acoso laboral hasta aburrirnos y que decidamos irnos perdiendo nuestros derechos después estar trabajando allí tantos años al servicio de Jampe Serviman”.
DESPIDO IMPROCEDENTE
Otro trabajador, Lázaro Candón de Alba, también ha sido despedido, pero ante la denuncia formulada la empresa aceptó despido improcedente y le abonó algo más de 3000 euros. En la madrugada del pasado 1 de octubre, tras finalizar su servicio en el parque de Santa Ana, entre las 22,00 y 02,30 de la mañana, se dirigió como es habitual a la Policía Local para hacer entrega del parte de incidencias. Habiendo terminado su horario de trabajo se acercó hasta la Feria de Muestras.
Le preguntó a un compañero que cómo iba el servicio y cómo se montaban “en previsión de que en los días siguientes fuera enviado allí y tener información para hacer mi trabajo correctamente, respondiéndome con mal tono que sólo montaban servicio los que estaban, que no iría nadie más, por lo que me fui”.
Tres días más tarde, al acudir al parque Santa Ana a realizar su trabajo, el inspector de servicio “me hace entrega de una carta la cual me dicen que estoy despedido por una falta muy grave y en ella firman como testigos tres vigilantes de seguridad”.
GRABACIÓN SALVADORA
Al día siguiente se acercó a las dependencias de Escualo Seguridad para esclarecer lo sucedido pero nadie le quiso recibir. Buscó un abogado laboralista y lo denunció al CEMAC.
En la carta de despido los motivos aducidos son pueriles en algunos casos y grave en otro, pues dicen que intentó entrar de forma ilícita al recinto, cuando en ningún momento hizo algo que llevara a pensar algo así. Se limitó a preguntar por los servicios y se marchó. Lo bueno para Candón es que una cámara de la Policía grabó la secuencia y no se ve que hiciera algo ilícito.
“Ahora me encuentro en situación de desempleo por una falsa acusación que hizo un compañero y que firman tres vigilantes de seguridad –manifiesta Candón-. Día tras día, me pregunto qué he hecho para que se me trate tan vejatoriamente y si para conservar el trabajo he de vender a un compañero. ¿Qué hubiera ocurrido de no existir la grabación? ¿Qué futuro me espera con el actual nivel de paro?”.
Sólo son tres de los varios ejemplos que hay. Los denunciantes se sorprenden de que el Ayuntamiento no tome cartas en el asunto, porque son varias las irregularidades cometidas, algunas de ellas graves.
http://puentechico1.blogspot.com/