"Nos vimos obligados a tirarnos a la calle"
En tiempos de bonanza, Ramón estaba contento con su trabajo. Durante ocho meses fue vigilante de seguridad durante la Expo del 2008. Después, las cosas empezaron a torcerse. "Por querer ayudar a unos parientes en Cartagena nos quedamos sin dinero y nos vimos obligados a tirarnos a la calle", relata Ramón a las puertas del comedor de la iglesia del Carmen de Zaragoza, donde está con su pareja. Llegaron a la capital aragonesa el pasado 8 de octubre, coincidiendo con el comienzo de las Fiestas del Pilar, después de haber estado merodeando por Santander, Pamplona y otras ciudades españolas. Ramón sale todos los días a buscar trabajo y, a pesar de los tiempos que corren, no tira la toalla. "Busco un empleo de cualquier cosa, tanto si es de camarero como en otro sector, pero que al menos tenga una justa remuneración", reclama. Mercedes apenas puede desplazarse unos metros porque sufre la enfermedad de la gota. Él está operado del costado izquierdo y ambos duermen todas las noches en un rincón del centro. Vinieron con lo puesto, pero en cuestión de una semana han conseguido cuatro mantas y dos sacos de dormir. Aún así, es poco para soportar el frío, reconoce Mercedes. Consiguen "tirar" cada día "con la voluntad de la gente". Luchan por un trabajo que les dé de comer, y también por encontrar a la hija de Mercedes, de la que hace tiempo que no saben nada.
http://noticiasvigilantes.foroactivo.com/vigilantes-de-seguridad-y-especialidades-f1/nos-vimos-obligados-a-tirarnos-a-la-calle-t9273.htm
En tiempos de bonanza, Ramón estaba contento con su trabajo. Durante ocho meses fue vigilante de seguridad durante la Expo del 2008. Después, las cosas empezaron a torcerse. "Por querer ayudar a unos parientes en Cartagena nos quedamos sin dinero y nos vimos obligados a tirarnos a la calle", relata Ramón a las puertas del comedor de la iglesia del Carmen de Zaragoza, donde está con su pareja. Llegaron a la capital aragonesa el pasado 8 de octubre, coincidiendo con el comienzo de las Fiestas del Pilar, después de haber estado merodeando por Santander, Pamplona y otras ciudades españolas. Ramón sale todos los días a buscar trabajo y, a pesar de los tiempos que corren, no tira la toalla. "Busco un empleo de cualquier cosa, tanto si es de camarero como en otro sector, pero que al menos tenga una justa remuneración", reclama. Mercedes apenas puede desplazarse unos metros porque sufre la enfermedad de la gota. Él está operado del costado izquierdo y ambos duermen todas las noches en un rincón del centro. Vinieron con lo puesto, pero en cuestión de una semana han conseguido cuatro mantas y dos sacos de dormir. Aún así, es poco para soportar el frío, reconoce Mercedes. Consiguen "tirar" cada día "con la voluntad de la gente". Luchan por un trabajo que les dé de comer, y también por encontrar a la hija de Mercedes, de la que hace tiempo que no saben nada.
http://noticiasvigilantes.foroactivo.com/vigilantes-de-seguridad-y-especialidades-f1/nos-vimos-obligados-a-tirarnos-a-la-calle-t9273.htm