Un sindicato policial dice que la vigilancia del local debe ser privada y el coste lo asuman los dueños
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El secretario en Galicia de la Unión Federal de Policía, el lucense Miguel González, estima que la vigilancia policial a la que está sometido desde hace semanas el club Queens, debería ser asumida por vigilantes privados para no tener que retirar a agentes del Cuerpo Nacional de Policía y de la Guardia Civil de las funciones de seguridad ciudadana que venían realizando. Este agente considera que, a nivel judicial, debería establecerse que los costes que generaría esta vigilancia tendrían que ser cargados a los responsables del establecimiento ya que considera que pueden tener bienes suficientes para hacer frente a los mismos. De hecho, al responsable del establecimiento, José Manuel García Adán, en su momento, le fue intervenida gran cantidad de dinero que estaba guardado en la caja fuerte de un banco. Parte de este dinero, en opinión del agente, podría destinarse a abonar la vigilancia del club. En opinión de Miguel González, los agentes dedicados a vigilar diariamente en varios turnos el club de O Ceao, podían ser destinados a las tareas de calle. Sin embargo, dijo, vigilan un club privado «para que no lo quemen».
Recordó este sindicalista policial que la plantilla de la comisaría lucense es reducida y, además, debe afrontar una gran carga de servicios. Citó como ejemplo, el caso de las custodias que han de hacer diariamente en los juzgados. La situación se agrava más al destinar agentes a la vigilancia del Queens. Ésta se hace las veinticuatro horas del día.
González estima que si se fueran vigilantes privados los que custodiasen el polémico club, los que diariamente pasan allí horas de servicio, los agentes podrán ser dedicados a «atender a la ciudadanía». «Por las mañanas tenemos hasta ocho funcionarios en los juzgados con detenidos. Así es imposible atender las demandas de los ciudadanos como quisiéramos», señaló González.
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El secretario en Galicia de la Unión Federal de Policía, el lucense Miguel González, estima que la vigilancia policial a la que está sometido desde hace semanas el club Queens, debería ser asumida por vigilantes privados para no tener que retirar a agentes del Cuerpo Nacional de Policía y de la Guardia Civil de las funciones de seguridad ciudadana que venían realizando. Este agente considera que, a nivel judicial, debería establecerse que los costes que generaría esta vigilancia tendrían que ser cargados a los responsables del establecimiento ya que considera que pueden tener bienes suficientes para hacer frente a los mismos. De hecho, al responsable del establecimiento, José Manuel García Adán, en su momento, le fue intervenida gran cantidad de dinero que estaba guardado en la caja fuerte de un banco. Parte de este dinero, en opinión del agente, podría destinarse a abonar la vigilancia del club. En opinión de Miguel González, los agentes dedicados a vigilar diariamente en varios turnos el club de O Ceao, podían ser destinados a las tareas de calle. Sin embargo, dijo, vigilan un club privado «para que no lo quemen».
Recordó este sindicalista policial que la plantilla de la comisaría lucense es reducida y, además, debe afrontar una gran carga de servicios. Citó como ejemplo, el caso de las custodias que han de hacer diariamente en los juzgados. La situación se agrava más al destinar agentes a la vigilancia del Queens. Ésta se hace las veinticuatro horas del día.
González estima que si se fueran vigilantes privados los que custodiasen el polémico club, los que diariamente pasan allí horas de servicio, los agentes podrán ser dedicados a «atender a la ciudadanía». «Por las mañanas tenemos hasta ocho funcionarios en los juzgados con detenidos. Así es imposible atender las demandas de los ciudadanos como quisiéramos», señaló González.