El Ayuntamiento asegura que mantiene la seguridad porque las alarmas y cámaras se reforzarán con más servicio de Policía Local
La crisis obliga al Ayuntamiento de Valencia a reducir las partidas presupuestarias de tal modo que hasta en un edificio como la Lonja, Patrimonio de la Humanidad, repercutirán los recortes. Los museos en general sufrirán un recorte del servicio de vigilancia privada en lo que se refiere a la presencia de agentes. En el caso de la Lonja, la propuesta en fase de licitación que ofrece el Consistorio a las empresas del sector estipula que la Lonja prescindirá de la vigilancia que actualmente se presta durante la apertura al público del edificio.
La joya del gótico civil español queda, de este modo, sin vigilante que la custodie, ni de día ni de noche. Serán los ordenanzas y los guías los que deban estar atentos a cualquier problema, según denunció ayer Juan Soto, concejal socialista en el Ayuntamiento de Valencia. Algo parecido al modelo sueco, donde se confía en el civismo del visitante de los museos, con resultados no siempre positivos. En países latinos como el nuestro, menos acostumbrados a campar por los museos sin vigilantes, habrá que ver el resultado de este recorte de la presencia de custodios privados.
Soto acusó de «irresponsabilidad» a la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, por «privar» de seguridad a la Lonja y las Atarazanas y reducir el servicio en varios museos y monumentos, «tras el reciente robo del cuadro de Joaquín Sorolla del Museo Benlliure».
Fuentes del Ayuntamiento de Valencia aseguraron que este descenso de la seguridad «no es cierto».
«Un apartado más»
«La vigilancia privada es un apartado más dentro de todos los modos en que se garantiza la salvaguarda del patrimonio valenciano, pero no el única. Desgraciadamente no disponemos de dinero para custodiar las 24 horas de cada día del año los monumentos y el patrimonio histórico de la ciudad, pero tenemos 1.700 agentes de la Policía Local», señaló el concejal de Modernización de la Administración y Patrimonio Histórico y Cultural en el Ayuntamiento, Vicente Igual, para quien, en el caso de la Lonja, «lo importante no es su interior, pues allí no hay colecciones de arte, sino su exterior».
«Los museos municipales, y entre ellos especialmente la Lonja», recalcó Vicente Igual, «van a seguir contando con seguridad, porque a los dispositivos permanentes de control y alarma se une la intensificación de la vigilancia nocturna de la Policía Local».
El concejal popular consideró las declaraciones de Soto «poco oportunas e inapropiadas para alguien que desempeña un cargo público, porque pueden provocar malentendidos y reacciones que nadie deseamos».
En 2002 se produjo el último acto vandálico reseñable en la Lonja, cuando un grupo de gamberros rompió una cristalera. Soto denunció ayer que el nuevo pliego que establece los horarios de vigilancia de los museos sólo contempla mantener el servicio las 24 horas en la Casa Museo Blasco Ibáñez y el Palacio de Cervelló. Los museos de Ciencias Naturales y el de Historia, hasta ahora con vigilancia todo el día, serán vigilados de noche.
NUEVOS HORARIOS
24 horas. El nuevo pliego en fase de licitación de horarios de vigilancia privada mantiene las 24 horas en la Casa Museo Blasco Ibáñez y el Palacio de Cervelló.
Nocturna. Los museos de Ciencias Naturales e Historia, hasta ahora con vigilancia todo el día, tendrán vigilancia nocturna.
Sin vigilancia. Las Atarazanas y la Lonja pasan de ser custodiados durante el horario de apertura a carecer de vigilancia.
www.lasprovincias.es
La crisis obliga al Ayuntamiento de Valencia a reducir las partidas presupuestarias de tal modo que hasta en un edificio como la Lonja, Patrimonio de la Humanidad, repercutirán los recortes. Los museos en general sufrirán un recorte del servicio de vigilancia privada en lo que se refiere a la presencia de agentes. En el caso de la Lonja, la propuesta en fase de licitación que ofrece el Consistorio a las empresas del sector estipula que la Lonja prescindirá de la vigilancia que actualmente se presta durante la apertura al público del edificio.
La joya del gótico civil español queda, de este modo, sin vigilante que la custodie, ni de día ni de noche. Serán los ordenanzas y los guías los que deban estar atentos a cualquier problema, según denunció ayer Juan Soto, concejal socialista en el Ayuntamiento de Valencia. Algo parecido al modelo sueco, donde se confía en el civismo del visitante de los museos, con resultados no siempre positivos. En países latinos como el nuestro, menos acostumbrados a campar por los museos sin vigilantes, habrá que ver el resultado de este recorte de la presencia de custodios privados.
Soto acusó de «irresponsabilidad» a la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, por «privar» de seguridad a la Lonja y las Atarazanas y reducir el servicio en varios museos y monumentos, «tras el reciente robo del cuadro de Joaquín Sorolla del Museo Benlliure».
Fuentes del Ayuntamiento de Valencia aseguraron que este descenso de la seguridad «no es cierto».
«Un apartado más»
«La vigilancia privada es un apartado más dentro de todos los modos en que se garantiza la salvaguarda del patrimonio valenciano, pero no el única. Desgraciadamente no disponemos de dinero para custodiar las 24 horas de cada día del año los monumentos y el patrimonio histórico de la ciudad, pero tenemos 1.700 agentes de la Policía Local», señaló el concejal de Modernización de la Administración y Patrimonio Histórico y Cultural en el Ayuntamiento, Vicente Igual, para quien, en el caso de la Lonja, «lo importante no es su interior, pues allí no hay colecciones de arte, sino su exterior».
«Los museos municipales, y entre ellos especialmente la Lonja», recalcó Vicente Igual, «van a seguir contando con seguridad, porque a los dispositivos permanentes de control y alarma se une la intensificación de la vigilancia nocturna de la Policía Local».
El concejal popular consideró las declaraciones de Soto «poco oportunas e inapropiadas para alguien que desempeña un cargo público, porque pueden provocar malentendidos y reacciones que nadie deseamos».
En 2002 se produjo el último acto vandálico reseñable en la Lonja, cuando un grupo de gamberros rompió una cristalera. Soto denunció ayer que el nuevo pliego que establece los horarios de vigilancia de los museos sólo contempla mantener el servicio las 24 horas en la Casa Museo Blasco Ibáñez y el Palacio de Cervelló. Los museos de Ciencias Naturales y el de Historia, hasta ahora con vigilancia todo el día, serán vigilados de noche.
NUEVOS HORARIOS
24 horas. El nuevo pliego en fase de licitación de horarios de vigilancia privada mantiene las 24 horas en la Casa Museo Blasco Ibáñez y el Palacio de Cervelló.
Nocturna. Los museos de Ciencias Naturales e Historia, hasta ahora con vigilancia todo el día, tendrán vigilancia nocturna.
Sin vigilancia. Las Atarazanas y la Lonja pasan de ser custodiados durante el horario de apertura a carecer de vigilancia.
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